La RAE descubre la única letra del español que sigue presente en otros idiomas

La RAE descubre la única letra del español que sigue presente en otros idiomas

A lo largo de su historia, el español ha experimentado diversas modificaciones.

Abecedario

El español, también conocido como castellano, es una lengua romance que tiene su origen en el latín vulgar, hablado por soldados, colonos y comerciantes romanos en la Península Ibérica. Con la caída del Imperio Romano, esta lengua fue evolucionando y desarrollándose, difundiendo sus palabras y sonidos por toda la región. A lo largo de su historia, el español ha experimentado diversas modificaciones, incluyendo la eliminación de ciertas letras. Un caso único en su historia es la eliminación de la letra Ç, también conocida como cedilla.

Según la Real Academia Española (RAE) la cedilla, que se originó en el latín vulgar para representar el sonido “ts”, era común en el castellano antiguo. Durante la Edad Media, esta letra se utilizaba en palabras como “plaçença” (placentia) y “fuerça” (fuerza). Sin embargo, con el tiempo, su uso fue disminuyendo debido a la evolución fonética y ortográfica del idioma. En la época moderna, la cedilla comenzó a usarse como una “s”, lo que llevó a su eventual eliminación en favor de la “z” para representar sonidos similares.

Antonio de Nebrija, en su “Gramática de la lengua castellana” de 1492, jugó un papel crucial en la normalización del español. Una de sus decisiones ortográficas más importantes fue eliminar la cedilla y reemplazarla por la “z” para representar el sonido /s/ en palabras donde antes se utilizaba la cedilla. Esta decisión marcó un hito en la evolución del español, consolidando su estructura fonética y ortográfica.

A pesar de su eliminación en el español, la cedilla sigue presente en otras lenguas romances como el francés, el portugués y el catalán. En francés, por ejemplo, la cedilla se utiliza para indicar que la “c” debe ser pronunciada como “s” en lugar de “k” antes de las vocales “a”, “o” y “u”, como en la palabra "garçon". Esta letra, que ha perdurado en otros idiomas, es un testimonio de la rica historia y evolución del español.

El español es la segunda lengua más hablada del mundo, solo por detrás del chino y por delante del inglés y el francés. Su expansión global se debe en gran parte a la colonización española durante la Edad Moderna, lo que ha llevado a su presencia en todos los continentes. A lo largo de su evolución, el español ha incluido y eliminado palabras, adaptándose a los cambios culturales y sociales de las regiones donde se habla.