La prensa inglesa carga contras los españoles por su comportamiento en la playa
La concejala de Playas y Medio Ambiente ha tenido que salir a desmentir las acusaciones.
Benidorm, ciudad de vacaciones. Ese podría ser el lema de los miles de británicos que año tras año visitan, ya sea en calidad de turistas o bien de ciudadanos españoles a todos los efectos, la ciudad alicantina.
Con el paso de los años la masificación del municipio costero ha ido creciendo a pasos agigantados, y no debería ser considerado como un ataque señalar que dicha masificación está comenzando a implicar problemas de convivencia entre turistas y nativos.
Aunque dependiendo del prisma con el que se vea, el 'problema' se puede enfocar de una u otra forma. En esta línea se ha posicionado el reconocido diario británico Daily Mail, que no se ha tomado especialmente bien que se responsabilice a esta saturación como el principal responsable de las disputas que se están produciendo, con especial atención en las playas.
"Guerra de sombrillas" por un motivo... ¿racista?
En un artículo publicado hace unos días, el medio inglés tituló con un "guerra de las sombrillas" entre los españoles y británicos, dejando entrever, y posteriormente confirmándolo en sus líneas, que el problema responde a una causa que roza el racismo por parte de los españoles y cuyo objetivo es acabar con la masificación de turistas británicos en nuestras costas.
Las disputas en la playa se han convertido en una constante durante este verano, provocando que tanto unos como otros acudan a la playa de madrugada, antes siquiera de que salga el sol, con el objetivo de encontrar un sitio privilegiado en primera línea y no quedar relegado a lugares más incómodos y rodeados de gente.
Además señala que los "funcionarios de Benidorm" han asegurado que serán "duros con los acaparadores de playa españoles que intentan vencer a los turistas británicos", al mismo tiempo que muestran imágenes de españoles ocupando la playa antes del amanecer.
No se trata de racismo sino de civismo
Ante la repercusión y relevancia tanto del artículo como de la situación en sí, la concejala de Playas y Medio Ambiente de Benidorm, Mónica García, ha salido al paso para desmentir estas afirmaciones.
En palabras de García, el problema no responde a ningún tipo de racismo, aunque reconoce que es un problema existente. "Hay gente que saca sus pertenencias a esta hora de la mañana y se va a casa, y eso es algo que no está permitido”, señala.
La concejala recordó que la ley no permite dejar las pertenencias en la playa para regresar al hotel o vivienda en cuestión, un hecho que, de producirse, será la Policía Local la que tenga total potestad para actuar, retirar las pertenencias abandonadas y multar si fuera preciso.