La palabra que usan en Zamora para pedir una de las golosinas más conocidas y en el resto de España no entienden
Es una más del vocabulario propio de sus gentes.
Zamora rebosa buena gastronomía, arte y naturaleza. La bella ciudad es una de las que apuntar en la lista de destinos pendientes para hacer una escapada de fin de semana si todavía no la conoces.
Recorriendo sus calles podrás contemplar el patrimonio histórico que la envuelve. La catedral de San Salvador, su muralla o la Plaza Mayor son joyas arquitectónicas de la ciudad. A nivel de provincia, el lago de Sanabria, considerado el lago de origen natural más grande de España, también es una parada obligatoria.
A esta belleza singular se suma el acogimiento de sus gentes, y es que de la visita, de relacionarte con los oriundos, puedes salir con una lista de palabras zamoranas que en el resto de España es más que probable que se desconozcan. Entre los localismos destacan ‘pipeleras’, unas bolsas de papel para evitar tirar las cáscaras de las pipas al suelo; o 'mamola', usado por sus habitantes para referirse a la barbilla.
Ponme un campeche, por favor
En mitad de la caminata por la ciudad, si paras para comprar una botella de agua en cualquier tienda de frutos secos y gominolas, quizás escuches decir a un niño o una niña: “Por favor, ponme un par de campeches”. La palabra 'campeche' se utiliza en Zamora para referirse al regaliz rojo.