La ciencia descubre el paso de España por el que viajan millones y millones de insectos cada año
Este camino es vital para la ecología amenazada por el cambio climático.
Investigadores de la Universidad de Exeter han examinado insectos migratorios en el paso de Bujaruelo, un abismo de 30 metros entre dos picos en los Pirineos. Durante cuatro años, el equipo viajó en otoño para observar la multitud y diversidad de insectos voladores que se dirigían al sur. Los resultados indican que los Pirineos son una ruta migratoria crucial para muchas especies, con miles de millones de insectos cruzando cada año.
David y Elizabeth Lack documentaron esta migración en 1950, durante su luna de miel. Después de casi 70 años sin estudios publicados, Will Hawkes y su equipo retomaron la investigación en 2018. Hawkes, del Centro de Ecología y Conservación del campus Penryn de Exeter en Cornwall, describió sus hallazgos como asombrosos, observando una gran cantidad de sírfidos de mermelada y otras especies.
Los insectos migratorios, incluidos las moscas domésticas y las mariposas blancas de la col, alcanzan su punto máximo durante el clima cálido, soleado y seco, con viento en contra que los mantiene a baja altura, facilitando su conteo. La mayoría de los insectos observados eran moscas, con insectos famosos como libélulas y mariposas representando menos del 2%.
Estos insectos son vitales para el medio ambiente, actuando como polinizadores y controladores de plagas, y contribuyendo a la salud del suelo y el desarrollo de las plantas. Sin embargo, las migraciones de insectos están disminuyendo debido a la degradación del hábitat y la crisis climática.
Hawkes enfatiza la importancia de proteger estos migrantes notables, difundiendo el conocimiento para fomentar la conservación de sus hábitats. Los insectos son resilientes y pueden recuperarse rápidamente si se toman medidas adecuadas para su protección.