La aldea de Valencia que oculta un castillo del Siglo de Oro y una piscina natural con una cueva subterránea
Se trata de una fortaleza de origen almohade que data de los siglos XII-XIX y que se alza majestuoso en el casco urbano.
En el corazón de la provincia de Valencia, existe un lugar donde el tiempo parece haberse detenido, y la naturaleza y la historia se entrelazan de manera fascinante. Bolbaite, una pequeña aldea situada en la Canal de Navarrés, emerge como un destino cautivador para aquellos que buscan descubrir los secretos mejor guardados de la región.
Al adentrarse en Bolbaite, uno no puede evitar sentirse transportado a otra época. El Castillo-Palacio de los Cabanyelles, una fortaleza de origen almohade que data de los siglos XII-XIX, se alza majestuoso en el casco urbano. Sus muros han sido testigos de la historia y albergan elementos góticos y renacentistas que reflejan la riqueza cultural del Siglo de Oro Valenciano. Este castillo no es solo una reliquia arquitectónica; es un símbolo del esplendor que vivió el antiguo Reino de Valencia.
Pero Bolbaite no solo ofrece un viaje al pasado a través de su arquitectura. La naturaleza ha jugado un papel fundamental en la configuración de este paisaje, creando espacios que invitan a la exploración y al disfrute. Uno de estos lugares es la zona del río de Bolbaite o Área Recreativa “Paraje del Río Sellent”, accesible desde el casco antiguo a través de un agradable paseo. Aquí, el Gorgo Cadena, con su cueva subterránea, ofrece una piscina natural de aguas cristalinas que se convierte en el refugio perfecto durante los meses más cálidos del año. Un puente de madera y una cascada añaden un toque de encanto a este paraje, que también cuenta con un área de picnic equipada para el disfrute de los visitantes.
La Ermita de Santa Bárbara, ubicada en la parte alta de Bolbaite, proporciona otra área recreativa desde donde se pueden contemplar vistas impresionantes del entorno2. Y para aquellos que aprecian las panorámicas, el mirador de los Secaderos de Tabaco ofrece una perspectiva única de la aldea y sus alrededores.
Las festividades también forman parte de la identidad de Bolbaite. La celebración de San Antón en enero es una de las citas más destacadas del calendario local, donde la comunidad se reúne para honrar sus tradiciones.
Finalmente, ningún viaje a Bolbaite estaría completo sin degustar las delicias locales. Los mantecados de almendra y los pasteles de boniato son el broche de oro a una experiencia que deleita todos los sentidos. Bolbaite es, sin duda, un tesoro escondido en Valencia que espera ser descubierto por aquellos dispuestos a aventurarse más allá de lo convencional.
