¿Es obligatorio tener socorrista en una piscina comunitaria?

¿Es obligatorio tener socorrista en una piscina comunitaria?

Estos profesionales deben contar con formación en primeros auxilios y socorrismo acuático.

SocorristaGetty

La llegada del verano y el aumento de las temperaturas suelen despertar el deseo de disfrutar de actividades al aire libre, como el uso de piscinas comunitarias. Sin embargo, es fundamental hacerlo de manera segura, y aquí es donde entra en juego la figura del socorrista. La normativa sobre la obligatoriedad de contar con socorristas en piscinas comunitarias varía considerablemente según la comunidad autónoma y el municipio en el que se encuentre la propiedad.

En la Comunidad de Madrid, por ejemplo, la contratación de socorristas es obligatoria en comunidades de vecinos con más de 30 viviendas. Además, estos profesionales deben contar con formación en primeros auxilios y socorrismo acuático. Por otro lado, en Cataluña, las piscinas comunitarias se consideran de uso privado y no están sujetas a la misma regulación que las piscinas públicas. En este caso, la decisión de contratar o no a un socorrista recae en la propia comunidad de propietarios.

Los ayuntamientos también pueden regular aspectos relacionados con la presencia de socorristas en piscinas comunitarias, siempre respetando la normativa autonómica aplicable. Por lo tanto, es recomendable consultar la ordenanza municipal correspondiente para asegurarse de cumplir con todas las exigencias legales.

El número de socorristas necesarios en una piscina comunitaria depende de varios factores, como las dimensiones de la piscina y el número estimado de bañistas. En algunas comunidades autónomas, la normativa establece que las piscinas de mayor tamaño deben contar con un profesional médico o de enfermería, además del socorrista, para garantizar una atención adecuada en caso de emergencia.

Es importante destacar que, aunque no sea obligatorio contar con un socorrista en todas las piscinas comunitarias, muchas comunidades de propietarios optan por contratar a estos profesionales para garantizar la seguridad de los usuarios. Además, la normativa de la comunidad de propietarios puede ser más estricta que la autonómica o municipal, estableciendo requisitos adicionales para la contratación de socorristas y la dotación de material de salvamento.

En cuanto a las funciones de los socorristas, estas también varían según la normativa aplicable. En general, se exige que los socorristas cuenten con la formación necesaria para desempeñar su trabajo de manera adecuada y que su presencia coincida con el horario de apertura de la piscina. Además, es común que se regulen las dotaciones y el material de salvamento que debe estar disponible para los usuarios, como salvavidas y otros equipos de rescate.

Aunque no siempre sea obligatorio contar con un socorrista, es fundamental que las piscinas comunitarias cumplan con ciertas normas de seguridad para prevenir accidentes y garantizar el bienestar de los bañistas. Estas normas pueden incluir la prohibición de determinadas actividades que puedan resultar peligrosas o molestas para otros usuarios, así como la exigencia de contar con material de salvamento adecuado.

El acceso a las piscinas comunitarias suele estar restringido a los propietarios de viviendas y a quienes alquilan estos inmuebles. La jurisprudencia establece que los propietarios de locales comerciales, plazas de garaje o trasteros no tienen derecho a utilizar las instalaciones de la piscina, lo que ayuda a mantener un control sobre el número de usuarios y a garantizar la seguridad.

En resumen, la normativa sobre la obligatoriedad de socorristas en piscinas comunitarias es compleja y varía según la comunidad autónoma y el municipio. Es fundamental que las comunidades de propietarios se informen sobre las exigencias legales aplicables en su zona y tomen las medidas necesarias para garantizar la seguridad de los usuarios de la piscina.