El truco rápido y sencillo para decir "hasta nunca" al mal olor después de fregar el suelo
La publicación recomienda lavar la fregona después de su uso para "evitar el crecimiento microbiano".
En ocasiones, a pesar de limpiar el suelo de casa con asiduidad, se queda con mal olor. Ya sea porque la fregona necesita un cambio, o los productos no son los idóneos, la revista griega The Home Issue tiene la solución.
El primer paso es lavar bien la fregona, ya que es probable que sea la responsable del mal olor. Lo mismo ocurre con su balde. Para obtener mejores resultados, sumerja el trapeador en agua tibia con lejía y jabón líquido antes de comenzar a trapear.
Según la publicación, se necesitan los siguientes materiales para conseguir que el suelo se quede con buen olor, y "son fáciles de encontrar por casa": una taza de vinagre, jabón para lavar la vajilla, aceite de oliva y agua caliente. "Todo ello se mezcla, y se echa al cubo de la fregona".
"El vinagre desinfectará y matará los gérmenes, el jabón para platos limpiará eficazmente y el aceite dará un olor hermoso a su hogar", dice el medio. Además, informa que "si no tienes aceite de oliva, puedes usar un poco de zumo de limón para una sensación de frescura".
Sin embargo, el medio advierte que "el primer paso es lavar bien la fregona, ya que es responsable que sea la responsable del mal olor". Por ello, recomienda hacerlo antes y después de limpiar.
"Sumérgela en un recipiente con lejía, líquido lavavajillas y agua tibia durante 10 minutos. Luego escúrrela bien y déjalo secar al sol para evitar el crecimiento microbiano", concluye la revista especializada.