El origen de uno de los salvapantallas más recordados de los 90
Este protector de pantalla no solo cautivó a los usuarios por su hipnótico diseño, sino que también se convirtió en un símbolo de la innovación tecnológica.
En la década de los 90, un elemento distintivo comenzó a aparecer en las pantallas de los ordenadores con sistema operativo Windows: un salvapantallas de tuberías entrelazadas en tres dimensiones. Este protector de pantalla no solo cautivó a los usuarios por su hipnótico diseño, sino que también se convirtió en un símbolo de la innovación tecnológica de la época. Pero, ¿cuál es la historia detrás de este salvapantallas que se mantuvo en el sistema operativo de Microsoft hasta Windows XP?
La respuesta nos lleva a los equipos de desarrollo de Windows NT, una versión del sistema operativo que estableció un antes y un después en la historia de Windows. En aquel entonces, Microsoft estaba preparando el lanzamiento de una nueva versión que incluiría soporte para OpenGL, una importante mejora que prometía cambiar el juego en el ámbito de la gráfica computacional.
Fue en este contexto de innovación y cambio que surgió la idea de utilizar un salvapantallas para promocionar las capacidades de OpenGL. Un empleado de Microsoft, cuyo nombre no ha trascendido, propuso organizar un concurso interno para seleccionar un nuevo salvapantallas que demostrara el potencial de esta tecnología. La propuesta fue bien recibida y, en poco tiempo, varios miembros del equipo presentaron sus creaciones, entre las que se encontraban 3D Text, 3D Maze, 3D Flying Objects y, por supuesto, 3D Pipes.
El proceso de selección se planteó como una votación entre los empleados, quienes tendrían la oportunidad de instalar y probar cada uno de los protectores de pantalla antes de emitir su voto. Sin embargo, antes de que la votación concluyera, un miembro del equipo de marketing de Microsoft probó los salvapantallas y quedó tan impresionado que decidió incluirlos todos en el producto final.
Así, en 1994, Windows NT 3.5 se lanzó al mercado con una colección de salvapantallas en 3D, entre los que se encontraba el famoso 3D Pipes. Este salvapantallas no solo cumplió con su función original de proteger las pantallas de los daños causados por la imagen estática, sino que también se ganó un lugar en la memoria colectiva de toda una generación de usuarios.
Con el paso del tiempo y la evolución de la tecnología, los salvapantallas fueron perdiendo relevancia. Windows Vista, lanzado en 2007, marcó el fin de una era al reemplazar los antiguos protectores de pantalla por opciones más modernas. Sin embargo, el legado de 3D Pipes perdura, y para aquellos nostálgicos que deseen revivir aquellos tiempos, existen páginas en internet que permiten experimentar de nuevo la magia de las tuberías en tres dimensiones.
La historia del salvapantallas de tuberías 3D es un claro ejemplo de cómo una idea simple puede trascender y convertirse en un icono de su tiempo. Aunque hoy en día los monitores ya no requieren de tales medidas de protección, el recuerdo de aquellos tubos entrelazados sigue vivo, recordándonos la importancia de la creatividad y la innovación en el mundo de la tecnología.