El hormigón causa la gran ‘crisis de la arena’
La ONU empezó a avisar de ello hace dos años.
Se trata de un elemento muy importante para la construcción de viviendas. El hormigón ha transformado por completo su uso, hasta unos límites que ahora las Naciones Unidas ha tratado de marcar.
En un informe de hace dos años del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), se detallaba que la extracción de arena se hacía sin necesidad de control en muchas regiones del mundo.
Pero, como segundo recurso natural explotado del mundo, tras el agua, su utilización ha crecido en las últimas décadas, hasta el punto de que la ONU se ha visto obligada a hablar de la "crisis de la arena".
Tal y como arrojó en el informe, se usan cada año unos 50.000 millones de toneladas de arena y grava. Unas cantidades muy preocupantes que ha alertado a muchos expertos.
Es por ello que, un equipo de la Rice University, propone poner fin el uso generalizado de la arena a cambio de otro material, el grafeno derivado del coque metalúrgico, un producto a base de carbón, podría servir no sólo como aditivo de refuerzo en el cemento sino también como sustituto de la arena en el hormigón.
"Esto podría tener un impacto importante en una de las industrias más grandes del mundo. Comparamos el concreto elaborado con el sustituto del agregado de grafeno con el concreto elaborado con agregados de arena adecuados, y descubrimos que nuestro concreto es un 25% más liviano pero igual de resistente", aseguró James Tour, profesor de TT y WF Chao de Rice y profesor de química.
El equipo de expertos asegura que el hormigón es "esencial para el desarrollo urbano" y se prevé que "la demanda de hormigón crecerá significativamente".
"Los experimentos iniciales en los que el coque metalúrgico se convertía en grafeno dieron como resultado un material que parecía similar en tamaño a la arena", explicó Paul Advincula, alumno de doctorado de Rice y autor principal del estudio.