El contenedor marino que hace agua potable para poblaciones de 41.000 habitantes
Estas desaladoras tienen un precio de 2,8 millones de euros.
Tener agua potable en lugares donde no llega es posible gracias a las desaladoras. Pero construir una supone una inversión muy importante, por eso comenzaron a fabricarse las desaladoras portátiles.
Como informa Diario Sur, las desaladoras portátiles son de tamaños muy diferentes: pueden caber en un maletín o ser enormes para poder abastecer de agua potable a miles de personas. Aunque hay algunas muy potentes que pueden introducirse dentro de unos contenedores como los de los puertos y pueden procesar unos 25.000 metros cúbicos de agua.
Se fabrican en una empresa que se ubica en Huelva y Madrid, que es resultado de la fusión entre la Sociedad Española de Tratamiento de Agua (SETA) y PHT. Y son la mejor opción para llevar el agua potable a lugares donde ha sucedido una catástrofe, como una erupción volcánica, pues con una desaladora de 5.000 metros cúbicos se puede suministrar agua a 41.000 ciudadanos.
Pueden estar en funcionamiento en tan solo 5 meses, 3 de los cuales corresponden a la fabricación. A continuación, hay que transportarlo al lugar donde se necesita agua potable y después se instala fácilmente en la zona indicada.
Además, son modulables, lo que permite que pueda ampliarse en cualquier momento, en función de las necesidades de la población. Y pueden colocarse en cualquier lugar, incluso en el mar.
En el caso de las desaladoras pequeñas, el metro cúbico cuesta 700 euros al día (350.000 euros). Pero en una más grande, de unos 5.000 metros cúbicos, cuesta 550 euros cada metro cúbico (2,8 millones de euros).