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El árbol más antiguo de Europa está en Canarias

El árbol más antiguo de Europa está en Canarias

Un entorno inhóspito ha sido clave para su conservación, protegiéndolo de la explotación humana y permitiéndole resistir las inclemencias del clima.

En la Isla de la Gomera, encontramos el parque de Garajonay, que dista de los dos colosales que imperan en las Islas Canarias. La frondosa vegetación y enormes cascadas forman estanques llenos de vida, hogar de cientos de especies vegetal...MINUBE/TXEMA LEON

En el corazón del Parque Nacional del Teide, en la isla de Tenerife, se erige un testigo silencioso del paso del tiempo. Este árbol, conocido como "Patriarca", es un cedro canario (Juniperus cedrus) que ha sobrevivido a innumerables adversidades durante más de 1.400 años. Su longevidad y resistencia lo han convertido en el árbol más antiguo de Europa, un título que ostenta con orgullo en el paisaje volcánico de las Islas Canarias.

El descubrimiento de este árbol milenario ha sido un hito significativo para la botánica y la conservación de la naturaleza. Investigadores del Instituto Universitario de Gestión Forestal Sostenible de la Universidad de Valladolid, la Universidad Rey Juan Carlos y el Parque Nacional del Teide han confirmado su edad mediante pruebas de Carbono 14, revelando que este cedro tiene 400 años más que el árbol que anteriormente se consideraba el más antiguo de Europa, un pino conocido como "Adonis" en Grecia.

El cedro canario "Patriarca" se encuentra en una zona de difícil acceso en Montaña Rajada, antes de las Minas de San José, dentro del Parque Nacional del Teide. Este entorno inhóspito ha sido clave para su conservación, protegiéndolo de la explotación humana y permitiéndole resistir las inclemencias del clima y las erupciones volcánicas. De hecho, este árbol ha sobrevivido a cinco erupciones volcánicas en los últimos 500 años, así como a sequías extremas y periodos de frío intenso, como la pequeña edad del hielo.

El proceso de datación del "Patriarca" fue meticuloso y riguroso. Los investigadores utilizaron técnicas de radiocarbono para analizar una muestra del tronco, encontrando hasta 329 anillos de crecimiento en poco más de 12 centímetros. Estos anillos no solo revelan la edad del árbol, sino también las condiciones climáticas y ambientales a lo largo de los siglos. Este estudio, publicado en la revista científica Ecology de la Ecological Society of America, ha sido fundamental para comprender la historia y la resiliencia de esta especie endémica de las Islas Canarias.

Para aquellos interesados en visitar este tesoro natural, es importante tener en cuenta ciertos trámites y procedimientos. El acceso al Parque Nacional del Teide está regulado para proteger su biodiversidad y minimizar el impacto humano. Los visitantes deben obtener un permiso especial para acceder a las zonas más protegidas del parque, donde se encuentra el "Patriarca". Este permiso se puede solicitar a través de la página web del parque o en las oficinas de información turística en Tenerife.

Además, se recomienda realizar la visita con guías autorizados que puedan proporcionar información detallada sobre la flora y fauna del parque, así como sobre la historia y características del cedro milenario. Las visitas guiadas no solo garantizan una experiencia educativa y enriquecedora, sino que también ayudan a preservar el entorno natural al asegurar que los visitantes sigan las rutas establecidas y respeten las normas de conservación.

El Parque Nacional del Teide, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 2007, es un lugar de extraordinaria belleza y valor ecológico. Además del "Patriarca", el parque alberga una gran variedad de especies vegetales y animales, muchas de ellas endémicas de las Islas Canarias. La conservación de este entorno único es una prioridad para las autoridades locales y los científicos, quienes continúan investigando y protegiendo sus tesoros naturales.

El "Patriarca" no solo es un símbolo de la resistencia y longevidad de la naturaleza, sino también un recordatorio de la importancia de la conservación y el respeto por el medio ambiente. Su historia, marcada por siglos de supervivencia en un entorno hostil, es un testimonio de la capacidad de adaptación y resiliencia de las especies vegetales. Visitar este árbol milenario es una oportunidad única para conectar con la historia natural de Europa y apreciar la majestuosidad de la naturaleza en su forma más pura.