Dos niños de 11 años rocían un tobogán con sosa caustica y provocan graves quemaduras a un bebé: "Lo sentimos profundamente"
El pequeño tendrá que someterse a un injerto de piel por la gravedad de las quemaduras.
Algo más que una travesura infantil. Dos niños de 11 años decidieron rociar con sosa cáustica un togobán en un parque situado en la ciudad francesa de Toulouse. Lo grave llegó cuando un niño de dos años se lanzó por la rampa, ya que sufrió graves quemaduras.
El pequeño tuvo que ser hospitalizado por las heridas en el muslo y sus nalgas, unas quemaduras de tercer grado por las que requerirá de un injerto de piel en el hospital. Junto a él, otro niño pequeño resultó herido, en este caso de carácter leve.
Tras conocerse los hechos, los dos preadolescentes admitieron haber vertido un producto corrosivo, habitual para fregaderos de cocina y lavabo. Ambos pasaron dos días detenidos, tras lo que fueron devueltos a sus hogares.
Ahora tendrán que someterse a un examen por parte de un psiquiatra para comprobar si su capacidad de discernimiento, antes de afrontar a sendos juicios por los hechos, cada uno en su localidad natal.
Ante lo ocurrido y para hacer frente a los pagos necesarios por el tratamiento de sus hijos, los padres de las dos víctimas han presentado una denuncia a la que se ha sumado el mismo Ayuntamiento de Toulouse como propietario del parque. Igualmente, los progenitores del pequeño herido grave han abierto una recaudación de fondos en línea.