Dos hombres enmascarados, una joven al volante y un trágico error de dirección. El Tribunal Penal de Toulouse (Francia) examinó el pasado miércoles un inaudito intento de asesinato en banda organizada que se saldó con tres personas condenadas, en un caso marcado por ajustes de cuentas y contratos criminales.

Los hechos se remontan a la madrugada del 4 de julio de 2023. Alrededor de la 1:20 de la madrugada, una pareja residente en Saint-Alban (Haute-Garonne) fue sorprendida por un violento intento de irrupción en su domicilio. Dos hombres, encapuchados y armados con una pistola automática calibre 40 cargada con cinco cartuchos, intentaron entrar por la fuerza creyendo que se encontraban en la casa de un hombre llamado 'Adel'.

La investigación, a la que ha tenido acceso France 3, explica que los atacantes"intentaron en vano entrar en la casa de las víctimas, donde pensaron que encontrarían a un hombre llamado 'Adel', pero habían ido a la dirección equivocada". Este error desencadenó una rápida intervención de las fuerzas del orden, y una investigación a fondo por parte de la división especializada en crimen organizado (DIPN 31).

"Uno de ellos, de Montpellier, fue detenido en flagrancia frente al domicilio de las víctimas, mientras que otro individuo y una joven, ambos de Marsella, fueron detenidos seis meses después por comisión rogatoria", detalló el fiscal de Toulouse.

Condenas de entre tres y siete años de cárcel

Las pesquisas sacaron a la luz un plan de asesinato orquestado desde Marsella, donde residía el presunto autor intelectual del ataque. Este individuo, condenado previamente por delitos de drogas y robo a mano armada, se encuentra ya en prisión preventiva por otros hechos graves, "en particular actos de asesinato cometidos en una banda organizada", según los magistrados.

El móvil del ataque fue un contrato por 40.000 euros, a repartir entre los tres implicados. El ejecutor detenido en Montpellier también acumulaba antecedentes por amenazas, violencia y tráfico de drogas. En contraste, la joven implicada no tenía antecedentes penales, pero admitió haber conducido a los atacantes hasta Toulouse, participar en la vigilancia previa y usar vehículos robados con matrículas falsas.

Al finalizar el juicio, el tribunal condenó a los tres acusados por "asociación ilícita con miras a la comisión de un delito castigado con al menos cinco años". El cabecilla fue sentenciado a siete años de prisión; el cómplice de Montpellier, a seis; y la joven, a tres años. Además, los tres recibieron una prohibición de cinco años de portar armas y de permanecer en el departamento de Haute-Garonne.

¡Mantente al día con El Huffpost! Sigue todas las noticias desde tu móvil en nuestra APP. Puedes descargarla tanto para Android como iOS.