"Detrás de mí" vs "Detrás mía": la RAE pone luz a la sombra eterna de los posesivos

"Detrás de mí" vs "Detrás mía": la RAE pone luz a la sombra eterna de los posesivos

En “detrás de María”, el núcleo es un adverbio, mientras que en “la casa de María”, el núcleo es un sustantivo.

Royal Spanish Academy or RAE, institution with a mission to ensure the stability of the Spanish language.Juan Aunion

La lengua española, rica y compleja, presenta desafíos incluso para los hablantes nativos. Uno de estos desafíos es el uso correcto de adverbios y posesivos en ciertas expresiones. La Real Academia Española (RAE) ha proporcionado directrices claras para evitar errores comunes, como el uso de “detrás mío” en lugar de “detrás de mí”.

El error común radica en equiparar el complemento preposicional introducido por la preposición “de” con los complementos de posesión. Por ejemplo, “detrás de María” se confunde con “la casa de María”. Aunque ambas construcciones parecen similares, son diferentes en su estructura y uso. En “detrás de María”, el núcleo es un adverbio, mientras que en “la casa de María”, el núcleo es un sustantivo. Esta diferencia es crucial para entender por qué no se puede decir “detrás mío”.

Los adjetivos posesivos son modificadores del sustantivo y solo pueden usarse correctamente si el complemento encabezado por “de” depende de un sustantivo. Por ejemplo, “la casa de María” puede transformarse en “su casa” o “la casa suya” sin problemas. Sin embargo, los adverbios no pueden ser modificados por un posesivo, lo que hace incorrecto decir “detrás suyo” o “detrás suya”.

Para discernir si una expresión con posesivo es correcta, es esencial fijarse en la categoría de la palabra núcleo. Si es un sustantivo, la expresión será correcta. Por ejemplo, “al lado mío” es correcto porque “lado” es un sustantivo. Pero si el núcleo es un adverbio, la expresión será incorrecta. Así, “cerca mío” es incorrecto porque “cerca” es un adverbio.

Una forma práctica de evitar errores es verificar si se puede usar el posesivo átono antepuesto. Si es posible, la construcción con el posesivo tónico pospuesto también será válida. Por ejemplo, “Estoy al lado de María” puede transformarse en “Estoy a su lado” y “Estoy al lado suyo”, ambas formas correctas. Sin embargo, “Estoy detrás de María” no puede transformarse en “Estoy en su detrás”, lo que hace incorrecto decir “Estoy detrás suyo”.

Además, el posesivo pospuesto debe concordar en género con el sustantivo al que modifica. Por ejemplo, debe decirse “al lado suyo” y no “al lado suya”, ya que “lado” es un sustantivo masculino. Este detalle es importante para mantener la concordancia gramatical en la expresión.

La RAE enfatiza que estos errores son comunes debido a la similitud en la estructura formal de las construcciones con preposiciones y posesivos. Sin embargo, entender la diferencia entre adverbios y sustantivos es clave para usar correctamente estas expresiones. La claridad en el uso del lenguaje no solo mejora la comunicación, sino que también refleja un dominio más profundo de la lengua.

 La próxima vez que te encuentres dudando entre “detrás de mí” y “detrás mío”, recuerda que la opción correcta es “detrás de mí”. Este conocimiento no solo te ayudará a hablar y escribir mejor, sino que también te permitirá apreciar la riqueza y precisión de la lengua española.