Declaran la guerra a las sillas de Mahou y Estrella Galicia en terrazas y chiringuitos
El Gobierno se pone serio.
El Ministerio de Sanidad quiere poner fin a la habitual presencia de mobiliario que está lleno de publicidad de marcas de cerveza en las terrazas de los bares españoles.
El anteproyecto de la ley de prevención del consumo de alcohol y sus efectos en menores de edad, aprobado este martes en el Consejo de Ministros, pretende prohibir la publicidad de las bebidas 0,0 en un radio menor de 200 metros de lugares frecuentados por menores; así como desterrar definitivamente el término 'consumo responsable' de la publicidad de bebidas alcohólicas. Además, quiere eliminar el mobiliario, mesas, sillas, toldos y servilleteros, patrocinado por marcas de cerveza y otras bebidas alcohólicas de los bares cerca de estos espacios destinados a menores.
Por tanto, el Ministerio de Sanidad ha extendido a la modalidad sin alcohol de bebidas tradicionalmente conocidas por ser espirituosas la eliminación de la publicidad en vía pública a excepción de más allá de 200 metros lineales de centros de educación, centros sanitarios, servicios sociales y sociosanitarios, parques y lugares de ocio infantil.
Este "0,0 washing" en el ámbito publicitario, como lo han denominado fuentes del departamento que dirige Mónica García, se debe a que la publicidad de estas bebidas supone "una promoción" de la misma marca que está vendiendo la bebida alcohólica. "De hecho, nos encontramos con alguna marca cuya versión sin alcohol es difícilmente encontrable para su consumo y su compra, pero es fácilmente encontrable para su publicidad", apuntan estas fuentes.
Además de prohibir la publicidad de bebidas alcohólicas y 0,0 en el radio mencionado, incluyendo el mobiliario de los bares, también se vetará el emplazamiento de publicidad en centros educativos, de protección, destinados a menores, o deportivos, ocio o espectáculos durante sesiones destinadas a menores de edad. A día de hoy, no hay norma estatal que prohíba el alcohol en los colegios e institutos, por lo que este puede ser consumido por el equipo docente, entre otros trabajadores de estos centros.
Un ejemplo de esto último son los partidos de fútbol en los que participan menores de edad. Con esta norma, los bares de estos centros polideportivos no podrían ofrecer bebidas alcohólicas, que suelen ser consumidas por los progenitores de estos pequeños. "Puede ser una pérdida por los padres de menores, pero entendemos que hay que velar por el entorno de las personas menores que acuden a hacer un actividad saludable, como jugar al fútbol, y que tienen a su alrededor a personas consumiendo alcohol. Ahí prima la promoción de la salud para menores de edad", han aclarado fuentes de Sanidad. En cambio, si la sesión no está programada para menores, el consumo se permite.