Compra un coche enterrado bajo la nieve: descubre la verdad oculta y las autoridades intervienen al acto
Aviso para próximos vendedores... Y compradores.
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Un hombre que compró un coche usado en concesionario acaba de ganar en Suecia una batalla legal importante. Cuando adquirió el vehículo, no pudo inspeccionarlo bien al estar este cubierto de nieve, algo que le impidió ver los desperfectos que poseía. Una vez quitada la nieve, pero ya comprado el coche, pudo ver que presentaba óxido, daños mal reparados y fallos en el sistema de calefacción.
Al descubrir todos estos desperfectos, el comprador quiso cancelar la transacción o, en caso contrario, que el concesionario reparara los defectos, a lo que se negó. Tras una investigación, la Junta de Disputas del Consumidor de Suecia determinó lo que el hombre defendía, que los fallos ya existían en el momento de la compra, por lo que el comprador podía cancelar la transacción.
Este caso demuestra la importancia de estar bien informado sobre los derechos del consumidor y, al comprar un vehículo, realizar bien inspecciones completas si se trata de un coche usado anteriormente.
También sirve, no obstante, para los vendedores, que deben proporcionar toda la información relevante sobre el estado real del automóvil. A la larga puede salir más caro tratar de engañar a los clientes.