El banco de niebla: la técnica definitiva para poner en su sitio a los manipuladores
Esta técnica, también conocida como "claudicación simulada", te ayudará a calmarte durante situaciones embarazosas o cuando sientas la telaraña de la manipulación.
Todos nosotros, en algún momento de nuestras vidas, hemos tenido que enfrentarnos a situaciones incómodas o críticas inesperadas, o nos hemos visto involucrados en conflictos que preferiríamos evitar. O incluso nos hemos sentido indefensos cuando notamos que alguien nos estaba manipulando, ya sea para infravalorarnos o por otros fines ulteriores. La aplicación de la "técnica del banco de niebla" puede ser una herramienta altamente efectiva para salir airosos de estas situaciones que, por desgracia, son muy comunes en la vida cotidiana.
Banco de niebla: orígenes y definición
El psicólogo Manuel J. Smith, reconocido por sus contribuciones en el campo de la asertividad y las habilidades sociales, nos ofrece una explicación detallada de la técnica del banco de niebla en su libro Cuando digo no, me siento culpable.
La técnica del banco de niebla, también conocida como "claudicación simulada", implica distraer a las personas presentes mediante el uso de frases estratégicas, sin comprometer nuestra posición original y reconociendo los argumentos y quejas de los demás. De esta manera, nuestra intervención no se percibe como un ataque directo y, en el caso de manipulación, nos libramos de este intento sin que el "atacante" lo note. Por un lado, dejamos un mensaje del estilo: "Recibido, ya veré qué hago al respecto" y, por otro lado, disminuimos nuestra sensación interna de urgencia. Con esto último, nos relajamos e impedimos que actuamos bajo la influencia de la rabia, la desazón o cualquier otro sentimiento negativo.
Precisamente por eso a esta técnica se la conoce como "banco de niebla". Un banco de niebla es una entidad perceptible pero etérea. Cuando alguien intenta hacer contacto o afectarlo físicamente, se encuentra con una resistencia que lo desvía de su curso, dejándolo atrapado en su propia inercia. Este banco de niebla representa un obstáculo insuperable para cualquier intento de ataque por parte del oponente. Se mantiene firme sin necesidad de aplicar ninguna fuerza directa, generando una barrera protectora alrededor de quien lo emite, impidiendo que otros se acerquen para interferir en su esencia más profunda.
Un ejemplo de usar la técnica del banco de niebla
La teoría del banco de niebla puede ser fácil de aprender, pero quizás te esté costando convertir esta explicación abstracta en un diálogo concreto. Para echarte una mano y puedas visualizar mejor esta herramienta, aquí tienes un ejemplo extraído de Conectia Psicología. Es un caso de manipulación de una madre sobre protectora hacia una chica adolescente:
Madre: Hija, ayer llegaste más tarde de lo normal.
Hija: En efecto, mamá. Llegué tarde.
Madre: Habíamos acordado que no puedes llegar a casa más tarde de las 10 de la noche.
Hija: Es cierto que acordamos eso, mamá. Lo que ha ocurrido es que estaba muy a gusto viendo una película en casa de Juan. Quería ver el final de la peli y no pensé que llegar a las 11 en lugar de las 10 iba a ser tan malo.
Madre: ¿No ves que todo esto lo hago por tu bien? Pueden pasarte cosas terribles si sigues saliendo por la noche.
Hija: Seguramente tienes razón, mamá. Puede pasarme algo por la noche o por el día. Por mi parte, evitaré cualquier situación en donde pueda ocurrir algo malo.