George y Amal: no sólo un matrimonio, también una pareja política
En Amal Ramzi Alamuddin (a la que Clooney conoció en octubre de 2013 y con la que se comprometió en abril de 2014), George ha encontrado a una pareja política y social que le aporta la misma magia que Joe Kennedy descubrió en Rose y Jack en Jackie.
Cuando Joseph "Joe" Patrick Kennedy se casó con Rose el 7 de octubre de 1914 tras un noviazgo de más de siete años, al padre de ella no le hizo demasiada ilusión. Joe era el hijo mayor de P.J. Kennedy, hombre de negocios y rival político de Honey Fitz, alcalde de Boston y padre de Rose. Sin embargo, Joe sabía exactamente lo que estaba haciendo al casarse. Rose, la encantadora y vivaz hija de Honey Fitz, a la que le encantaba hacer campaña con su padre, era la pareja perfecta de Joe, que le ayudaría a reunir el poder y el control para lograr la ambición de su vida.
El 12 de septiembre de 1953, el hijo de Joe, el senador John F. "Jack" Kennedy, un conocido soltero de oro, también sabía lo que estaba haciendo al casarse con la impresionante y cautivadora Jacqueline Bouvier Kennedy, cuyos orígenes superaban a los de él. Antes, durante y después de ocupar la Casa Blanca, el mundo quedó prendado de Jackie.
El 29 de septiembre de este año, George Clooney se casó oficialmente con la activista de derechos humanos, Amal Alamuddin, en el Ayuntamiento de Venecia, en un acontecimiento precedido por dos días de lujosas fiestas y actos. El público no ha podido obtener más información de esta pareja impecablemente glamurosa.
Fijaos bien en esta unión planeada al detalle de un hombre que defiende la privacidad en su Villa Oleandra del Lago de Como en Italia, y os daréis cuenta de que es más que una exquisita pareja vestida al gusto de Stella McCartney, Giambattista y Oscar de la Renta, con una sombrerera con el logo de AG (Amal y George) para ella y un Armani para él. Al observarlo bien de cerca, lo que se descubre es el surgimiento de una ambiciosa pareja política, una pareja que planea lentamente y con cuidado evolucionar como fuerza política reconocible. La suya no es una simple boda; era una fiesta de presentación política. Los detalles de la boda se han compartido hasta la saciedad, por lo que el mundo entero estaría dispuesto a votarlos.
La historia de esta fiesta de presentación política es fascinante: hasta que George no conoció a Amal siempre había dado a entender que su único matrimonio con la actriz Talia Balsam (entre 1989 y 1993) había sido suficiente (en el sentido positivo). Siempre había hecho hincapié en que no volvería a casarse, si bien había publicitado sus relaciones con otras muchas mujeres, desde la actriz Ginger Lynn Allen hasta Sarah Lawrence, pasando por la italiana Elisabetta Canalis. Pero la lista no acaba ahí: Kelly Preston, Krista Allen y Renee Zellweger también entran. Cada una de las mujeres en la vida de Clooney ha sido acusada de ser un complemento más para él. Y a aquellos que dicen que Clooney es gay, él les responde: "Lo último que me veréis hacer es ir de un lado para otro asegurando que es mentira. No voy a dejar que nadie insinúe que ser gay es algo malo"(entrevista con Voss Brandon, The Advocate, 29 de febrero de 2012).
La participación de Clooney en cuestiones públicas, campañas y activismo social es de sobra conocida. Apoyó las campañas de Barack Obama en las elecciones de 2008 y 2012. Apoya los derechos de los homosexuales y se opuso a la guerra de Irak. Además, Clooney está muy implicado en labores humanitarias. Junto con Brad Pitt, Matt Damon, Don Chaedle, David Pressman y Jerry Weintraub, apoya con firmeza la organización Not On Our Watch Project, para centrar la atención mundial sobre los horrores de las atrocidades en masa. También acompañó al columnista de The New York Times, Nicolas D. Kristof, a Goz (Chad) en 2009; y en 2010 organizó el programa Hope for Haiti Now para ayudar a las víctimas del terremoto. Ha luchado con perseverancia por la resolución del conflicto en Darfur. Desde que George Clooney saltara a la fama como el doctor Doug Ross en Urgencias, siempre se ha involucrado en películas que tratan diversos problemas sociales.
En Amal Ramzi Alamuddin (a la que Clooney conoció en octubre de 2013 y con la que se comprometió en abril de 2014), Clooney ha encontrado a una pareja política y social que le aporta la misma magia que Joe descubrió en Rose y Jack en Jackie. Clooney fue a la Universidad Northern Kentucky entre 1979 y 1981 y cursó Periodismo Audiovisual; luego asistió durante un breve período de tiempo a la Universidad de Cincinnati. Pero nunca se graduó. Mucho antes de que lo clasificaran como la estrella televisiva más sexy de todos los tiempos en 2005, se ganó la vida vendiendo seguros y zapatos de mujer, ordenando estanterías, trabajando en la construcción y cortando tabaco.
Alamuddin, por su parte, habla árabe, inglés y francés. Es una abogada de éxito especialista en Derechos Humanos y Derecho Penal. Amal ha recibido premios académicos y tiene un Máster en Derecho por la Universidad de Nueva York. Además, fue nombrada una de las 21 abogadas más sexys de Londres por el blog Your Barrister Boyfriend, en el que la describían como "aparentemente, el ideal inalcanzable de la feminidad contemporánea. Es impresionantemente guapa y espectacularmente exitosa".
Los padres de Amal, al igual que la pareja de recién casados, tienen diferencias culturales. Su padre, Ramzi, profesor jubilado de Empresariales en la Universidad Americana de Beirut, es druso, una minoría cuasi musulmana de Líbano que entra en la denominación chií del Islam. Su madre, Bariaa, editora de un boletín panarábigo llamado al-Hayat, es musulmana suní. Como regalo de boda, Amal ofreció a Clooney unos gemelos de oro con su nombre escrito en árabe. Clooney, criado en una familia católica muy devota, ha afirmado que no sabe si cree en el cielo o en dios (revista Parade, 7 de junio de 1998). Me imagino el impacto que se produciría si esta pareja condenara de forma conjunta el fundamentalismo más bárbaro.
El compromiso y la boda de Amal Alamuddin y George Clooney no es sino una muestra de todo lo que nos espera. El suyo no es un matrimonio de dos individuos interesantes y con talento. También es el matrimonio del impecable glamour y de la compatible ambición política. ¡Y será fascinante ver la evolución de ambas uniones!
Traducción de Marina Velasco Serrano