Por qué los 'millennials' prefieren viajar a tener un trabajo estable
Me fui al extranjero hace cinco años, cuando tenía 24. Primero pasé cuatro años en Alemania dando clases de Inglés mientras viajaba por Europa. Cuando me cansé del frío, me trasladé a Costa Rica en busca del calor. Puede que mis decisiones fueran algo alocadas, pero me gusta pensar que son decisiones positivas.
Has visto los artículos y las fotografías que los jóvenes blogueros de viajes publican mientras viajan por toda Europa o se relajan en playas tropicales. Parece una vida muy glamurosa, pero ¿de verdad es así? Los millennials se están encargando de descubrirlo.
Me fui al extranjero hace cinco años, cuando tenía 24. Primero pasé cuatro años en Alemania dando clases de Inglés mientras viajaba por Europa. Cuando me cansé del frío, mi novio y yo nos trasladamos a Costa Rica en busca del calor. Puede que mis decisiones fueran algo alocadas, pero me gusta pensar que son decisiones positivas.
Cuando empecé esta gran aventura, mi caso era poco habitual, pero en estos últimos cinco años he visto cómo muchos de mis compañeros han cambiado el traje por un billete de ida. Y estos son los motivos:
Hacemos las cosas más tarde:
En comparación con nuestros padres, hacemos las cosas más tarde. Según Pew Social Trends, sólo el 26% de los millennials están casados a los 32 años. Eso significa que nos pasamos la veintena intentando descubrirnos de verdad. Como no nos ata un cónyuge o unos niños, podemos vivir en el extranjero sin preocuparnos de si nuestros hijos se adaptarán a una nueva cultura o de si nuestra pareja encontrará trabajo en un país nuevo.
Si nos casamos y tenemos hijos más tarde, tampoco tendremos tanta presión por tener un trabajo bien pagado con el objetivo de mantener una familia. Eso nos permite tener una vida llena de aventuras y de diferentes culturas.
Tenemos una ética de trabajo diferente:
Los millennials tienen una ética de trabajo diferente a la de las generaciones anteriores. Para nosotros no es tan importante tener un trabajo a tiempo completo con la posibilidad de progresar como tener un trabajo que ofrezca flexibilidad, buenos beneficios y diversidad de obligaciones. Vivir en el extranjero proporciona la oportunidad de encontrarte con un entorno de trabajo distinto.
Por ejemplo, cuando vivía en Alemania, trabajaba como profesora de Inglés freelance. Sobrevivía trabajando veinte horas a la semana, dando clase cuando quería y viajando constantemente. Si quería tomarme un día libre, lo hacía. Si sólo quería dar las clases que empezaban a las 9:00, sólo daba esas clases. Obviamente, no me pagaban cuando no trabajaba, pero la flexibilidad de ese trabajo me permitía llevar el estilo de vida que quería.
Podemos trabajar online:
Somos una generación de emprendedores. Los jóvenes no queremos trabajar detrás de un escritorio para alguien durante toda nuestra vida. Somos una generación a la que se nos ha inculcado que podemos hacer todo lo que nos propongamos. Somos expertos en tecnología y tenemos recursos. Podemos tener una trayectoria profesional de éxito utilizando únicamente el ordenador. Si sólo se trabaja online es muy fácil viajar. Lo único que necesitas para trabajar es tener conexión a Internet (y, en la actualidad, es fácil conseguirla en cualquier parte del mundo).
Es más fácil conseguir trabajo en el extranjero
Puede parecer una locura, pero es más fácil conseguir trabajo fuera. Los millennials se aprovecharán de esas oportunidades. Yo soy un ejemplo perfecto de ello. Después de acabar la universidad, me volví a casa de mis padres y estuve buscando trabajo durante seis meses, llorando por todos los mails de rechazo que recibía.
Cuando me mudé a Alemania, encontré trabajo de profesora de Inglés la primera semana que estuve allí. Este idioma es imprescindible para los negocios, por lo que la cantidad de puestos de trabajo de profesores de Inglés va en aumento. No sólo es fácil encontrar trabajo de profesor, también resulta relativamente fácil conseguir trabajo como au pair o en el sector del turismo. Si lo que quieres es un trabajo que te permita viajar, hay muchos puestos temporales a tu disposición.
Es sencillo:
Ahora, gracias a la tecnología, es más fácil que nunca. Vivimos en una época en la que es posible conectar con personas y empresas de cualquier parte del mundo en unos pocos segundos. El miedo de mudarse al extranjero puede apaciguarse al encontrar trabajo antes de llegar, poder hablar con otros emigrantes y explorar desde tu casa el lugar donde te vas a ir a vivir mientras te tomas un café.
Política:
Si cierto hombre de pelo fabuloso y tez naranja se convierte en presidente de Estados Unidos el próximo noviembre, creo que va a haber un éxodo de millennials estadounidenses frustrados. No puedo hablar por todos, pero las personas de las que me rodeo son abiertas y creen en la igualdad, independientemente de la orientación sexual, del color de la piel, de la religión, del sexo y del estatus social. Si Trump gana las elecciones, creo que los millennials estadounidenses se mudarán a países más abiertos.
Parece que siempre amenazamos con hacer esto en período de elecciones, pero la diferencia es que ahora hay muchas oportunidades en el extranjero y tenemos una mentalidad muy distinta a la de las generaciones anteriores.
Este post fue publicado originalmente en The Wanderlanders.
Este post fue publicado con anterioridad en la edición estadounidense de 'The Huffington Post' y ha sido traducido del inglés por Irene de Andrés Armenteros.