¿Todos somos enfermos?
La Asociación Médica Americana acaba de definir la obesidad como enfermedad, lo que significa que una gran mayoría de los estadounidenses son enfermos. Es el culmen de la sanitarización social que estamos viviendo, de la nueva religión que etiqueta y crea más enfermedad.
¿Es viable una sociedad que defina a la mayoría de sus miembros como enfermos?
La Asociación Médica Americana acaba de definir la obesidad como enfermedad, lo que significa que una gran mayoría de los estadounidenses son enfermos (de todos los adultos 68,8 % tienen sobrepeso y obesidad; 35,7 % obesidad). Es el culmen de la sanitarización social que estamos viviendo, de la nueva religión que etiqueta y crea más enfermedad.
Yo como médico de familia no estoy de acuerdo. Una persona obesa no es una enferma. Algunos lo serán. Algunos tendrán más riesgo de tener enfermedades y problemas de salud. Pero eso no hace que automáticamente sean enfermos.
Hay muchos intereses para que haya más enfermos. Esto significa negocio. Ganancias para los que fabrican tratamientos y tecnología sanitaria, para la industria y las corporaciones aseguradoras. Cada año se crean nuevas enfermedades, se bajan los límites para ser considerado enfermo (cifras de tensión arterial o colesterol, por ejemplo), se invierte en grandes sumas en favorecer los chequeos o pruebas médicas innecesarias.
Aportar una visión crítica a este panorama es una prioridad social. Creo que hay que redefinir urgentemente lo que es salud y lo que es enfermedad. Y lo tenemos que hacer entre todos y todas.