Un pueblo bate el récord de impuestos fiscales gracias a la muerte del ganador de Euromillones
El impuesto de sucesiones han provocado millones de beneficios a las arcas públicas.
En los últimos años, los ingresos por impuestos de sucesiones han aumentado de manera constante en Suiza, casi duplicándose desde 2019. Una contribución significativa a este aumento provino de una ganadora de Euromillones de la comunidad de Leuggern, quien en 2018 se llevó un premio de 183,9 millones de francos suizos.
La afortunada ganadora, una empleada de servicio, y su esposo decidieron construir una casa en su comunidad, fundaron una organización benéfica y planearon un viaje alrededor del mundo. La comunidad y sus residentes se beneficiaron enormemente del premio, ya que las sustanciales contribuciones fiscales permitieron reducir considerablemente la tasa de impuestos locales.
Sin embargo, la historia de esta familia tomó un giro trágico. En 2021, la mujer falleció a la edad de 50 años debido a un cáncer, y solo seis meses después, su esposo de 60 años también falleció. La muerte de la ganadora tuvo un impacto directo en las finanzas de Leuggern: el año pasado, la comunidad recaudó una suma extraordinaria de 2,7 millones de francos en impuestos de sucesiones y donaciones, una cifra récord. Según el sistema de distribución fiscal, dos tercios de estos ingresos (5,4 millones de francos) fueron al cantón, mientras que un tercio quedó en la comunidad.
La segunda muerte de la familia también está prevista para generar significativos ingresos fiscales para Leuggern. Aunque aún no se ha determinado cuánto recibirá la comunidad tras el segundo proceso de herencia, es claro que se espera otra suma considerable.
Los 2,7 millones de francos recaudados tras la muerte de la ganadora de Euromillones representan la segunda suma más alta obtenida por impuestos de sucesiones y donaciones en la región. En total, el cantón de Argovia y sus comunidades recaudaron 66,1 millones de francos en impuestos de sucesiones y donaciones el año pasado. Rafael Odermatt, responsable de estos impuestos en la administración fiscal cantonal, confirmó que 2023 fue un año récord, con un aumento notable en los ingresos provenientes de donaciones.
