El tope de Francia a los alimentos básicos vuelve a partir el Gobierno: Díaz lo reclama y Planas lo deja en manos de los empresarios
La medida afectará a varios centenares de productos básicos en grupos como Carrefour o Intermarché.
Un mismo gobierno, dos formas de ver los hechos. El acuerdo alcanzado en Francia con los grandes supermercados para poner un tope al precio de los alimentos básicos ha abierto un nuevo frente en la coalición. Así, mientras Yolanda Díaz lo celebra y recuerda que es una propuesta que defiende, el titular de Agricultura y Alimentación, Luis Planas, lo deja en manos de los empresarios.
Según el pacto presentado por el Elíseo, varios grupos de distribución claves, como Carrefour o Intermarché, han aceptado reducir sus márgenes de beneficio con una cesta de productos que cada empresa elegirá y que llevarán un etiquetado común, "trimestre antiinflación", como recoge la Cadena SER.
Serán entre 200 y 500 artículos "al precio más bajo posible" en virtud del acuerdo. La rebaja llegará a costa de sacrificar márgenes de la distribución, no de los obtenidos por agricultores e industriales, añaden desde el Elíseo.
El programa comenzará en los próximos días y se extenderá entre mediados de marzo y mediados de junio. Las cifras aún no son oficiales, pero según el ministro de Economía, supondrá "varios cientos de millones de euros" de coste para las entidades. "Se trata de proteger lo mejor posible a nuestros compatriotas contra la subida de precios" y de aplicar la idea de que "el coste de la inflación debe ser compartido", ha añadido el ministro.
Un motivo de celebración para Yolanda Díaz, defensora de un sistema idéntico para España. "Llevo desde el verano pasado señalando no solo que esto era posible sino que es imprescindible, me alegro mucho por esta decisión", ha apuntado este lunes la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, defensora de estos 'topes' a los productos básicos.
Ha recordado que ella lleva meses reclamando algo así en España en tanto que además de ser posible también es “legal” ofertar “una cesta de productos, los que sean, con un precio limitado”. Una "asignatura pendiente" que, insiste, además es legal, porque lo avala el artículo 13 de la Ley de Comercio Minorista.
Para Díaz, este artículo admite la opción de fijar precios o hacerlo en el caso de los márgenes de comercialización de determinados productos, de cara a revertir la tendencia inflacionista de los alimentos. “Este precepto lleva con nosotros muchísimos años” y permitiría que la “gente pueda vivir un poco más feliz”, ha subrayado.
Pero también en esto hay desavecencias en Moncloa. Desde el ala socialista del Ejecutivo, el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha preferido pasar la pelota a los empresarios.
"Si las empresas pueden plantear iniciativas similares en nuestro país que lleve a una contención de los precios, pero siempre con respeto a la Ley de la Cadena Alimentaria y que no sea en perjuicio de la industria ni de los productores", ha señalado Planas.
El titular de Alimentación ha asegurado que desde el Gobierno "hemos planteado a la distribución de forma repetida que contenga en medida de lo posible los precios de los alimentos". "En Francia, alguna cadena ya lo ha puesto en marcha y en España se han hecho propuestas parciales, pero todo tiene que hacerse en respeto de la Ley de la Cadena", ha reiterado.