"La vida sigue sin Presupuestos"
El ala socialista del Gobierno mira ya a las cuentas de 2026 y Díaz protesta: "Gobernar no es resistir". Ante sus socios europeos, Feijóo asegura que Sánchez ha perdido el control.

Pedro Sánchez esbozaba una sonrisa impostada cuando, al término del Consejo Europeo del jueves en Bruselas, una periodista le preguntó si contempla convocar elecciones en caso de no sacar adelante las cuentas públicas este año. “Ahora necesitamos estabilidad”, respondió, dejando claro que no piensa llamar a los españoles a las urnas. En el PSOE dan por descontada la prórroga de los actuales Presupuestos, ya desfasados, sin ni tan siquiera llevar los de 2015 al Congreso para su deliberación y votación.
De momento, el presidente ha sido incapaz de materializar unas cuentas públicas esta legislatura. Siempre se ha comprometido a aprobarlas en tiempo y forma y, después, ha desechado la idea. Quizá quien más haya empeñado la palabra en este sentido haya sido la ministra de Hacienda, María Jesús Montero. “Un Gobierno sin cuentas es tan útil como un coche sin gasolina”, le dijo el propio Sánchez a Mariano Rajoy, entonces presidente, allá por 20218.
Oficialmente, el Gobierno asegura que no ha tirado la toalla y que continúa negociando con los grupos parlamentarios en el Congreso. Pero estos le desmienten. “No están hablando con nosotros sobre este tema”, afirma uno de sus socios habituales en el hemiciclo, que añade: “Hoy por hoy, perderían seguro la votación”.
En Moncloa se dan hasta el mes de mayo para llevar a las Cortes Generales el proyecto presupuestario, según avanzó EFE. Si entonces Sánchez no tiene garantizados los síes, pensará ya en los del año próximo. Si bien, ministros socialistas admiten que, salvo giro de última hora, no harán grandes esfuerzos para darle un empujón a la negociación. “La vida sigue. La situación económica española es positiva y mejor estabilidad a ruido. España no necesita unos nuevos Presupuestos, estamos bien con los que tenemos”, en palabras de un alto cargo socialista.
Añade además un diputado socialista que abrir “de verdad” el melón presupuestario supondría también un desgaste enorme por las demandas de los partidos requeridos para la suma en el Congreso. En concreto, las del fugado Carles Puigdemont.
En las estructuras más críticas con estas cesiones, como la de Castilla-La Mancha, lo tienen claro: “Cada vez el peaje es más caro. Y nunca se van a cansar de pedir. Sánchez está en una situación imposible por no haber dicho que no a tiempo”, según las fuentes consultadas. En los últimos días, Emiliano García-Page ha sido especialmente crítico por el pacto de Sánchez con Junts en materia migratoria: “Solidarios sí, tontos no”, se revolvió.
La presión de Díaz
Pese a este contexto, hay al menos una persona en el Consejo de Ministros que sí defiende llevar los Presupuestos al Congreso. Cuando el ala socialista del Gobierno filtró esta semana que tiraba la toalla y miraba ya al 2016, Yolanda Díaz no dudó en alzar la voz públicamente: “El Gobierno tiene la obligación de presentar a nuestro país las políticas públicas que quiere defender e intentar conseguir que se tramiten. Luego, si no lo conseguimos, veremos qué decisión se toma”, afirmó en Telecinco.
En su equipo lo argumentan así: “Una cosa es gobernar y otra resistir. Sánchez se afana en lo segundo y nosotros creemos que tenemos que explicarle a la gente lo que queremos hacer. Luego, en el Congreso, todos los partidos se retratan. Quienes digan que no a las políticas progresistas después tendrán que justificarlo”, según las fuentes consultadas.
Comité Ejecutivo del PP
En el principal partido de la oposición están seguros de que ni Presupuestos ni mucho menos elecciones. “En Moncloa tienen las mismas encuestas que nosotros… Más allá de la propaganda, todo el mundo tiene claro que si hoy hay elecciones, Sánchez deja de ser presidente”, apuntan en la dirección nacional, conscientes eso sí de que Alberto Núñez Feijóo necesitaría del apoyo de Santiago Abascal.
El pasado, también en Bruselas como Sánchez, el líder gallego participó en la tradicional reunión que los líderes del PP europeo celebran antes de las cumbres comunitarias. A Ursula Von der Leyen y a otros mandatarios conservadores, Feijóo les trasladó que el presidente español ha perdido el control no ya del Congreso sino de su propio Ejecutivo.
“Sánchez se presenta ante nuestros socios europeos con un Gobierno dividido, unos socios parlamentarios en contra, sin ningún plan ni compromiso explícito y sin el apoyo del parlamento español para aumentar el gasto en defensa”, es el resumen que hace en el PP. “Y, encima, sin haber aprobado unos Presupuestos”, rematan las fuentes consultadas.
Un mensaje que reiterará este lunes en el Comité Ejecutivo Nacional, que se celebrará en Madrid. Es el órgano en el que Feijóo se reúne con sus barones territoriales aunque no se desplazará Carlos Mazón, el presidente valenciano. “Mejor así…”, sugieren fuentes de Génova. El objetivo es no desviar el mensaje: “La debilidad de Sánchez es total”.