La Universidad Autónoma de Madrid desafía a Ayuso y se une a las protestas en apoyo a Gaza
La Comunidad de Madrid quiere evitar que la política llegue a las aulas y plantea medidas para evitar estas muestras de condena a Israel.
Estudiantes de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM) se han unido este lunes a la ola de protestas para exigir el fin del genocidio en Gaza con una marcha que ha recorrido el campus desde la Facultad de Filosofía hasta el Rectorado.
De esta forma la asamblea de estudiantes de la UAM se ha sumado al movimiento internacional universitario de apoyo al pueblo palestino para protestar contra el genocidio en Gaza, la complicidad del Gobierno español y los lazos de la universidad con empresas armamentísticas, han destacado en una nota los promotores de la acción.
En el comunicado que los estudiantes han leído en el Rectorado se indicaba que lo que hoy se ve en Gaza es "una masacre que está teniendo lugar con la absoluta complicidad de Estados Unidos, de la Unión Europea y también del Gobierno español, que continúa comprando y vendiendo armas y manteniendo relaciones económicas y políticas con el Estado de Israel (…) al mismo tiempo que endurecen las fronteras para aquellos que huyen de la guerra, el hambre y el expolio".
Además, han denunciado que la Universidad había invitado a dar una charla a un exmarine de los Estados Unidos y la OTAN, una charla que finalmente ha sido suspendida.
La movilización ha terminado con una asamblea donde los estudiantes han debatido cómo seguir organizándose en solidaridad con Palestina y han decidido acudir a la convocatoria prevista este martes en la Ciudad Universitaria de la Universidad Complutense de Madrid (UCM), a las 12:30, donde se celebrará una asamblea abierta de toda la comunidad universitaria de Madrid para decidir los pasos a seguir.
Ayuso trata de evitar protestas en la universidad
Mientras los universitarios madrileños se organizan, la Consejería de Educación, Ciencia y Universidades convocará en los próximos días la Conferencia de Rectores de las Universidades Públicas de la Comunidad de Madrid para velar por que se mantenga "la política fuera de las aulas" en casos como el del conflicto entre Israel y Palestina, después de que la Junta de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociología de la Complutense (UCM) aprobara hace unos días una declaración que pedía la suspensión de la cuenta bancaria que esta institución tiene con el Banco Santander "por financiar la industria fósil y la industria armamentística implicada en el genocidio sobre Gaza".
En esta declaración, aprobada por en la reunión de la Junta del pasado 26 de abril, desde la Facultad se acusa a ésta y otras entidades bancarias españolas de financiar a la industria de los combustibles fósiles en todo el mundo, así como a compañías que dotan "de cazas y helicópteros al ejército israelí", que están relacionadas con "la fabricación de drones con la Industria Aeroespacial Israelí (IAI)" o que desarrollan "proyectos solares israelíes en territorio ocupado palestino", al tiempo que las relacionan con la venta de armamento a otros países como Arabia Saudí o Emiratos Árabes Unidos, por lo que se pedía a la UCM la suspensión de la cuenta bancaria.
"Desde luego nos parece inadmisible. Nosotros siempre defendemos que la política debe quedar fuera de las aulas. Desde la Comunidad de Madrid vamos a hacer todo lo posible para que esto sea así", ha subrayado el consejero del ramo, Emilio Viciana.
"Debemos dejar siempre la política fuera de las aulas. Los alumnos están en una edad en la que es, digamos, normal hablar de política y nosotros consideramos que esto es perfectamente factible, pero lo que no puede ser es que desde las propias instituciones educativas se anime en un determinado sentido hacia determinadas posiciones políticas", ha remarcado este lunes.