La joya de la flota de la Guardia Civil contra el narcotráfico se rompe

La joya de la flota de la Guardia Civil contra el narcotráfico se rompe 

El alcalde de Algeciras denuncia las carencias del Servicio Marítimo.

Las pruebas de mar de la patrullera 'Río Flumen' efectuadas en la Ría de Vigo.GC

La lucha contra el narcotráfico en el Campo de Gibraltar ha recibido un nuevo golpe. La patrullera Río Flumen, presentada como "la más rápida del mundo", capaz de alcanzar una velocidad de 60 nudos y preparada para operaciones complejas (está equipada con un lanzagranadas), lleva fuera de servicio desde el verano por culpa de un fallo estructural.

El regreso de la embarcación, una pieza clave en la estrategia de la lucha de las redes del narcotráfico que operan en el Estrecho de Gibraltar, aún no tiene una fecha clara. Según Diario Áreael Ministerio del Interior asegura que el fallo de la patrullera se corregirá muy pronto, pero en una zona donde la velocidad y la capacidad operativa son esenciales, cada día que pasa en el embarcadero significa darle ventajas a las mafias.

La Río Flumen entró en servicio en marzo de 2023 entre grandes expectativas. Con una velocidad prometida de 60 nudos, se pensó que sería el revulsivo que necesitaba la lucha contra las lanchas rápidas de los narcotraficantes en el Estrecho. Sin embargo, desde el primer momento, la patrullera ha mostrado un rendimiento inferior. "No hemos alcanzado las velocidades anunciadas en varias operaciones", señalan algunos guardias civiles.

El Campo de Gibraltar es una de las zonas más castigadas por el tráfico de drogas. Los narcotraficantes aprovechan cualquier debilidad en las operaciones de la Guardia Civil para incrementar su actividad, y la falta de medios se ha convertido en un factor clave. La inactividad de la Río Flumen agrava una situación ya complicada, dejando a las fuerzas de seguridad con menos herramientas para combatir un problema cada vez más violento.

Los agentes en la zona aseguran que la ausencia de la patrullera ha dejado un vacío difícil de cubrir con las embarcaciones actuales, que no pueden competir con las lanchas de los narcotraficantes. "Es una lucha constante, pero muchas veces parece que estamos solos", lamenta uno de los agentes que patrullan diariamente las aguas del Estrecho.

Desde hace años, los agentes de la Guardia Civil denuncian la falta de medios y la lentitud en la llegada de refuerzos efectivos. Aunque la incorporación de la Río Flumen les dio una esperanza, su inactividad ha dejado claro que el problema va más allá de la llegada de nuevas herramientas. "No es solo una cuestión de tener más medios, sino de que esos medios funcionen y estén operativos cuando más se necesitan", afirman.

Un problema crónico

El alcalde de Algeciras, José Ignacio Landaluce (PP), ha aprovechado el problema grave de la patrullera del Servicio Marítimo de la Guardia Civil para denunciar una "importante ausencia de medios" del cuerpo en el Campo de Gibraltar, donde "actualmente presenta varias patrulleras inoperativas para llevar a cabo su misión de lucha con el narcotráfico y las mafias" en el Estrecho.

"Esta situación no solo deja en clara desventaja a la Guardia Civil en su lucha contra las mafias y el narcotráfico sino que viene a poner en evidencia la necesidad de implantar un auténtico Plan Especial para el Campo de Gibraltar con recursos, medios y herramientas para las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado a la vez que se implante la Zona de Especial Singularidad", denunciaba en un comunicado enviado a los medios.

Además, Landaluce ha pedido explicaciones el Ministerio del Interior, ya que entiende que "necesitamos saber qué está pasando con los medios policiales, qué medidas se están llevando a cabo y qué planes tiene el Gobierno a corto plazo para dar solución a un problema que nos inquieta", señala. "Poco o nada se sabe con claridad sobre los dos procesos de licitación que el Ejecutivo de Pedro Sánchez tenía en marcha para adquirir seis patrulleras, dos de las cuales ya fueron entregadas, como la Río Flumen, que está fuera de servicio, y que no son suficientes para vigilar el Estrecho", añadía.

Titania
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Santander

Finalmente, José Ignacio Landaluce ha pedido al Ministerio de Grande-Marlaska "seriedad y rigor a la hora de tomar este tipo de decisiones" y ha pedido el Ejecutivo que "convierta en una prioridad las necesidades de la comarca de una vez por todas", que escuche a sus alcaldes y a los agentes sociales y económicos, que "coinciden en la necesidad de inversiones reales en seguridad, empleo, e infraestructuras para esta zona".