La cumbre de la ultraderecha europea en Madrid termina con incontables elogios a Trump, referencias a la "Reconquista" y críticas a "lo woke", la OMS y la ONU

Madrid ha sido testigo y protagonista de la Cumbre de la alianza política de extrema derecha, Patriotas por Europa (Patriots), encabezada por Santiago Abascal, al que actualmente ke toca el turno de presidencia de la formación política -motivo por el cual el evento ha tenido lugar en la capital de España-, y que ha estado acompañado de lo más granado de la ultraderecha europea: desde Salvini hasta Orban, pasando por Le Pen o miembros del partido alemán, Alternativa para Alemania (AfD).

Plagado de mensajes populistas, proclamas respecto a "Hacer Europa Grande Otra vez" (Make Europe Great Again), -sacado del trumpismo Make America Great Again)- y constantes referencias a Donald Trump, como máximo exponente de las políticas liberales y de ultraderecha, que sus 'pupilos' europeos quieren importar al Viejo Continente, el acto ha estado presenciado por algo más de 2.000 personas, que se han dado cita en el la capital madrileña.

Con breves comparecencias por parte de líderes y políticos de todos los países europeos que se han dado cita en Madrid, el mensaje de unidad ha sido claro: Seguir los pasos de Donald Trump, "combatir la destrucción de la civilización occidental y cristiana" y aplicar medidas mucho más restrictivas en materia de inmigración, de género y climática, tan recurrente en los discursos de la extrema derecha europea.

Entre los Orban, Le Pen y Milei -que ha participado de forma telemática-, también se encontraba Matteo Salvini, líder de la ultraderecha Liga italiana y vicepresidente del país transalpino. Y, al igual que sus compañeros de alianza, ha arremetido contra lo que a su juicio es Europa hoy día: "Europa no es la jaula que construyeron en Bruselas", aseguró.

"No es la Unión Europea la que legitima a los Estados, sino que son los Estados los que legitiman, de lo contrario la Unión Europea no existiría", dijo Salvini, en un discurso en el que criticó a la capital europea, la UE y a los organismos "supranacionales".

"Toca parar de financiar organizaciones supranacionales, como la Organización Mundial de la Salud, que defiende los intereses de las multinacionales y no de los ciudadanos", agregó. Además, y en la línea de todos los líderes reunidos en Madrid, ha criticado también a la Corte Penal Internacional, asegurando que "pone a los terroristas islámicos al mismo nivel que a Netanyahu, que es un primer ministro elegido democráticamente".

Abascal apela a Trump, a la Reconquista y critica a la UE y la OMS

Por su parte, el presidente de VOX, Santiago Abascal, ha sido el último en comparecer. Lo ha hecho entre vítores y aplausos de todos los presentes -al igual que previamente sus colegas europeos- y ha insistido en ese mismo mensaje. Y del mismo modo, ha pronunciado un discurso apelando al sentimiento, a ir contra "todo lo woke, las grandes tecnológicas y la mayor censura que Europa ha experimentando en tiempos de paz".

Pero sin duda, si ha habido un nombre que ha sido mencionado por encima de cualquier otro, ese ha sido el de Donald Trump. Tanto por Abascal como por Le Pen, Salvini, Orban y un largo etcétera. Ha recibido incontables halagos por parte de todos los que iban subiendo al escenario.

Y uno de los más efusivos ha sido, sin dudas, Santiago Abascal. El líder de Vox ha dado un discurso largo -el más-, y ha insistido en aprovechar la corriente 'trumpista' para ganar terreno a las "políticas socialistas, islámicas, europeístas y anticlimáticas" que el político español considera "el cáncer de nuestro tiempo".  

"Vamos a ser protagonistas de una victoria histórica y la herramienta para una victoria histórica de las ideas de la libertad y de la soberanía. Adelante patriotas de Europa, sin miedo a nada ni a nadie", ha arengado Abascal a los líderes de los partidos de ultraderecha asistentes a la cumbre.

"Fuimos el muro de Europa ante el avance del islamismo y estamos dispuestos a volver a hacerlo", ha garantizado el también líder de Vox. Durante su intervención, ha reivindicado que Patriotas, conglomerado de partidos que forman el grupo homónimo en el Parlamento Europeo, es el futuro de Europa y ha llamado a luchar por las libertades.

Y otro que no podía faltar a la cita ultra era Orban. El fundador de la alianza Patriots, tiró varios capotes a Abascal, a quien prometió ayudar  "para lidiar con este toro enfurecido", y reclamó que "es el momento de Vox" en España.

El presidente húngaro, tirando de metáfora taurina, aseguró que Abascal es "un líder valiente, el torero más valiente que jamás he visto en la política", y fue, junto a Marine Le Pen, uno de los más críticos con la Unión Europea y Bruselas -aunque fue la tónica dominante durante todo el evento-.

"Por culpa de Bruselas, la economía europea se está hundiendo", dijo. "Estamos destinando nuestro dinero a Ucrania, en una guerra sin esperanza y Europa está siendo invadida por inmigrantes ilegales. Bruselas ha abierto las puertas a los inmigrantes ilegales", insistió. Y sacó pecho de su gestión al frente de Hungría: "Nos hemos defendido de la inmigración, ningún inmigrante ilegal puede entrar en Europa a través de Hungría. Cruzar la frontera sin permiso es un delito en mi país".

"En Hungría no hay compromiso en cuanto a la inmigración y el resultado: el número de los inmigrantes en Hungría es cero", afirmó. "Hemos introducido en la Constitución que todos estos poderes del Estado tienen la obligación de defender la cultura cristiana" y que "la madre es una mujer y el padre es un hombre", continuó Orban sobre las políticas ultraderechistas aplicadas en su país.

"Los burócratas de Bruselas, Estados Unidos y Soros (George Soros) nos persiguen porque hemos protegido nuestro país mientras ellos han arruinado a Europa", concluyó.