José Pablo López, el hombre que salió de RTVE por fichar a Broncano y vuelve como presidente

Le quedaba una votación y la ha ganado. José Pablo López ya es el presidente de RTVE con los votos del Congreso de los Diputados. 

Tras su abrupta salida el 26 de marzo de RTVE por el fichaje de David Broncano, poco o nada se ha sabido del malagueño hasta que el PSOE y sus socios hicieron pública su lista de consejeros para RTVE. Ahora, vuelve como presidente de la corporación y pudiendo liderar el plan que Elena Sánchez Caballero no le dejó desarrollar cuando era director de contenidos con fichajes como el de Broncano o la incorporación de Belén Esteban en el jurado de Baila como puedas. Un pulso que unos entendían como una transformación de Telecinco de la pública aumentando el contenido 'rosa', y otros como una oportunidad de competir con la privada quitándose el complejo de irrelevancia que llevaba acompañando a RTVE.

Años de ruido, titulares interesados en digitales contra López y su gestión al frente de Telemadrid y antigua posición en RTVE provocan en la corporación un cuasi estado de alerta ante las decisiones que puede tomar ahora que es el presidente y no el director de contenidos.

"Jose Pablo López es un directivo que ha trabajado con gobiernos de la derecha y la izquierda que lo que busca es la relevancia de RTVE y usar las mismas armas que usan las cadenas privadas. Si bien no tiene publicidad, debe competir y demostrar que el presupuesto de RTVE está bien empleado. Se ha visto cuando estuvo como director de contenidos con la decisión de Broncano, tiene ojo para esto", explica Juanma Fernández, periodista especializado en televisión.

"En RTVE su mirada se recibe con incertidumbre porque va a tener más poder, pero saben que es un perfil que suele ser bastante transversal a la hora de trabajar, sean de una familia o de otra. En RTVE hay muchas familias y sabe que tiene que trabajar con todas", añade.

Una opinión unánime que expresan en privado y en público todo tipo de profesionales del sector. "José Pablo va a luchar por una TVE competitiva, que pelee por las audiencias sin perder su sentido como servicio público que aspira a los mas altos niveles de audiencia. Y eso genera contrincantes", explica Daniel Forcada, exdirector de comunicación y marketing de Telemadrid bajo el mandato de López. "La rivalidad es buena para que la tele pública no quede relegada a un papel de no incomodar a nadie", expresa.

Fue en Telemadrid donde López demostró ese resurgir. Cuando fue cesado por Ayuso, López había saneado las cuentas con superávit de 2.800.000 euros y había aumentado la audiencia en un 15%. La pública madrileña había pasado de tener una parroquia minoritaria de espectadores a volver a ponerse, por defecto, en las cafeterías y bares volviendo a recobrar su relevancia.

"En Telemadrid, José Pablo se encontró una tele que estaba completamente externalizada tras el ERE, reducida al mínimo, completamente ignorada por la audiencia, y la hizo competitiva. Todo lo que puso en marcha sigue ahí: Madrid Directo, 120 Minutos, Juntos, Buenos Días Madrid… impulsó el área digital, recuperó empleo y gestionó la cadena con un Gobierno que no dejaba de poner obstáculos", resume Forcada.

"En esa cuadratura, siempre cerró los ejercicios económicos con beneficios y con audiencias muy superiores a las actuales. Creo que no se pueden poner pegas a ese modelo de gestión de lo público. Todo lo demás, fue ruido que intentaba siempre oscurecer aquellos logros", comenta.

Casi dos décadas dedicado al sector audiovisual

Tras su trabajo en Écija Abogados, lleva trabajando de manera directa para el sector audiovisual desde el año 2006, cuando asumió la dirección del Área Jurídica de la recién creada laSexta. Bajo el liderazgo de José Miguel Contreras, comenzó a adquirir experiencia en la gestión televisiva, lo que le permitió ocupar cargos de mayor relevancia, como el ser adjunto a la dirección general. En 2010, su carrera dio un giro y se incorporó a Trece, entonces propiedad de la Conferencia Episcopal, donde ejerció como director general. Durante esa etapa, la cadena se consolidó como un medio cercano al Partido Popular durante el mandato de Mariano Rajoy.

En 2017, con el consenso de la Asamblea de Madrid, López fue designado director general de Telemadrid poniendo fin a 'TeleAguirre'. Durante su gestión, la cadena experimentó un giro hacia la neutralidad tras años de acusaciones de manipulación bajo gobiernos del PP. Una independencia que no gustó a Isabel Díaz Ayuso y que hizo que en 2021, cuando obtuvo la mayoría absoluta le echara como primera medida legislativa para volver a virar la cadena a una línea editorial afín.

No tardó mucho en encontrar trabajo. Apenas unos meses más tarde asumió el cargo de director de Contenidos de RTVE. Durante este periodo, el directivo enfrentó múltiples críticas competir con las cadenas privadas en un intento de sacar de la irrelevancia a la pública pulsando varias teclas en las que encadenaba tanto aciertos como errores. Una ambición, adquiriendo los derechos programas caros que se mezclaban con el ruido que le acompaña desde Telemadrid dando espacio a nuevas producciones de gigantes como Globomedia.

A pesar de estas turbulencias, lo cierto es que en Moncloa tenían claro desde su destitución que era la persona elegida para dirigir RTVE conscientes de su habilidad para navegar entre las corrientes políticas y su búsqueda de consensos. Y a partir de hoy, a eso está.