El Gobierno de coalición se parte en el Congreso por la ley del 'sólo sí es sí'

El Gobierno de coalición se parte en el Congreso por la ley del 'sólo sí es sí'

El PSOE saca adelante su propuesta de reforma de la ley con el apoyo de la derecha y la ultraderecha en medio de un enfrentamiento nunca visto en la coalición.

Andrea Fernández, del PSOE, sube a su escaño tras intervenir en el debate. De fondo, las ministras Belarra y Montero, de Unidas Podemos.Europa Press via Getty Images

La cara de la ministra de Igualdad, Irene Montero, a su llegada al Congreso de los Diputados, reflejaba lo que estaba a punto de vivir: la división más evidente y palpable del Gobierno en lo que va de legislatura merced a una ley impulsada por su Ministerio, la ley del 'sólo sí es sí'. 

Una ley que todos asumen que hay que cambiar, pero en la que hay diferencias tan profundas sobre el cómo que ha provocado una brecha nunca vista en el Ejecutivo, cuyos socios se han dicho las cosas a la cara como nunca desde el inicio de la coalición. 

El colofón ha llegado con la votación, en la que el PSOE ha sacado adelante la tramitación de su propuesta gracias a los votos de la derecha y la abstención de la ultraderecha (231 votos a favor, 58 abstenciones y sólo 56 votos en contra) en una sesión marcada por la tensión entre socialistas y morados.

La pregunta en los pasillos del Congreso era la misma: ¿aguantará la coalición tras lo de esta noche?

Abrió fuego el PSOE, a través de su responsable de Igualdad, Andrea Fernández, muy dura con las consecuencias de la ley, cuya entrada en vigor ha conllevado rebaja de penas e incluso excarcelaciones de agresores sexuales, unas 700, según datos del Poder Judicial.

"Hay que ser responsables, hay que ser consecuentes", expresó Fernández mirando a Irene Montero y a Ione Belarra, ministra de Asuntos Sociales y líder de Podemos, que se mantenían impertérritas ante lo que estaban escuchando de boca de sus socios de Gobierno. 

"El Grupo Socialista asume la responsabilidad de la reforma de esta ley", dijo Fernández, quien ha asegurado que "no se ha tocado ni una coma" del consentimiento en la ley. Acto seguido, ha puesto al PSOE en el centro del diseño "de la arquitectura política y legal en materia de Igualdad" en España. "Lleva el sello de los socialistas, siempre con rigurosidad técnica", agregó en un claro dardo al Ministerio de Igualdad y obviando que el de Justicia, cuando Juan Carlos Campo era su titular, dio el visto bueno a la ley. 

"Estamos cansadas de sus peroratas, dejen la hipérbole, hablen de sus propuestas", ha expresado Andrea Fernández, del PSOE, a Podemos

"Nos gustaría", agregó Fernández desde la tribuna dirigiéndose directamente a Unidas Podemos, "que nos hablaran de sus propuestas para hablar de esta ley". "Estamos cansadas de sus peroratas, dejen la hipérbole, hablen de sus propuestas", ha agregado.

La diputada socialista ha acabado su intervención insistiendo en el mensaje que el PSOE ha querido dejar claro durante toda la jornada: "No importa con quién sino el para quién". 

Podemos no se queda atrás

La respuesta de Podemos no se ha quedado atrás. Lucía Muñoz, portavoz de los morados en este debate, ha arrancado asegurando que lo que iba a pasar en el Hemiciclo era "algo gravísimo". 

"Las señorías del PSOE se levantarán a aplaudir con las de Vox y del PP una reforma de la ley 'sólo sí es sí' que elimina el consentimiento del Código Penal. Hoy se han aliado con Vox y con el PP para volver al Código Penal de La Manada. Para que vuelvan a preguntarnos si cerramos bien las piernas, cuántas veces dijimos no o con qué fuerza nos resistimos", ha afirmado la diputada morada entre las exclamaciones de los parlamentarios socialistas, que mostraban su indignación. 

Los rostros de las diputadas del PSOE, especialmente de Andrea Fernández, también mostraban la gravedad del momento. El trago estaba siendo tremendo. 

Muñoz ha atribuido las rebajas de condenas de agresores sexuales a una minoría de jueces que interpretan la ley "en sentido contrario a la voluntad del legislador" y a "un puñado de fascistas que pretenden volver al silencio o la culpa".

La parlamentaria de Podemos ha acusado al PSOE de "traicionar el grito de miles de mujeres en las calles". "No están fallando a sus votantes, están dando la espalda a todas las mujeres de este país", ha señalado Muñoz, quien ha afirmado que los socialistas iban a votar junto a "los que recurrieron el aborto, derogan leyes trans o los que consideran que las personas LGTBIQ+ son una moda de Netflix". 

"No están fallando a sus votantes, están dando la espalda a todas las mujeres de este país", ha dicho Lucía Muñoz, de Podemos

"Mañana es 8-M, tenemos que salir todas a inundar la plazas para decir a los fascistas que somos muchas más. Todas las feministas y los feministas tenemos que gritar alto y claro que sólo sí es sí. Somos imparables, que viva la lucha de las mujeres", ha concluido Muñoz, quien se ha fundido en un abrazo con las dos ministras de su partido y que ha sido muy ovacionada por los suyos.

El PSOE tilda de "irresponsable" a Podemos

Una alocución muy criticada por Patxi López, portavoz socialista en el Congreso, quien en los pasillos no ha dudado en tildar de "irresponsable" e "Impresentable" una intervención que considera "fuera de la realidad" y que "es mentira" cuando afirma que se vuelve al Código Penal de La Manada.

Desde el PSOE consideran que la respuesta de Podemos, de quien esperaban que atendieran a la "reflexión" que les había pedido precisamente López horas antes y cambiasen su voto, sólo ha dado la razón a los socialistas. 

Creen que los morados debían de haber hablado sobre su alternativa a la propuesta del PSOE y recuerdan que el Código Penal no es una norma sencilla de modificar, e insisten en ser rigurosos en su modificación. 

Respecto a la imagen de la votación junto a PP y Vox, los socialistas repiten que lo importante no es "con quién" sino "para quién" y confían en que la división vista en el Parlamento no se traslade este miércoles a las manifestaciones por el 8-M.

El PP se frota las manos

En mitad de este río revuelto, el PP se frotaba las manos con la pesca que se avecinaba. Cuca Gamarra, su portavoz y secretaria general, se mostró encantada de subir a la tribuna a aprovechar la ocasión. Parecía que jugaba en casa. 

"El debate no tiene que ver con la alarma por la rebaja de penas o la liberación de agresores sexuales. El PSOE no la ha presentado por la alarma social sino por la alarma electoral, por el desplome demoscópico de Sánchez", ha expresado desde la tribuna. 

Lejos de achacar los errores de la ley sólo al Ministerio de Igualdad, de Podemos, Gamarra ha querido señalar directamente al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. La portavoz del PP ha ido con todo. "¿Dónde está la ministra de Justicia?", ha comenzado preguntándose para luego apuntar al jefe del Ejecutivo, al que ha acusado de esconderse tras las mujeres. "Nosotras a dar la cara mientras él se esconde detrás de las mujeres de su Gobierno y de su partido".

Si se habrá gustado el PP con la disensión interna en el Gobierno que ha aprovechado el lema de Podemos —sí se puede— para hacer un juego de palabras a su favor: "Sí se puede, claro que se puede. Dimitir. Sí se puede, claro que se puede. Cesar". 

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Jefe de Política de El HuffPost