El novio de Ayuso denuncia al Gobierno de Almeida por filtrar datos de las obras ilegales de su vivienda
La denuncia ha sido presentada ante la Agencia Española de Protección de Datos.
Alberto González Amador, pareja de Isabel Díaz Ayuso, ha denunciado ante la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) al Ayuntamiento de Madrid, acusándole de filtrar datos relativos al expediente de las obras ilegales que acometió en su piso de Chamberí en el año 2022 y que se conocieron tras estallarse su presunto fraude fiscal.
Una noticia, que adelanta El Debate hablando de "fuentes próximas al consistorio", donde se pide que se identifiquen a los presuntos responsables de la fuga de información.
Lo cierto es que cualquier miembro de la corporación municipal puede tener acceso a esos expedientes y los concejales pueden hablar libremente de ellos siempre y cuando no se publiquen o no se de ningún dato confidencial.
Fuentes de Más Madrid señalan que se trata de un "recado" que quiere "mandarle Ayuso a a Almeida a través de la Agencia Española de Protección de Datos, porque no le gusta que la ley sea igual para todos".
"El problema no es la filtración de un expediente, sino el trato de favor que ha tenido el clan Ayuso por parte del Ayuntamiento de Almeida: recordemos que la inspección municipal actúo en mayo gracias a la denuncia de Más Madrid de dos meses antes, un año y medio después de que el propio Ayuntamiento ordenara paralizar unas obras ilegales, que nunca se paralizaron. La denuncia del novio de Ayuso es una cortina de humo, incapaz de tapar el cúmulo de mentiras e irregularidades que salpican a la presidenta", indican.
De hecho, el concejal Antonio Giraldo, del PSOE, tuvo problemas. La Ley 7/1985, de 2 de abril, Reguladora de las Bases del Régimen Local establece en su artículo 77 que "todos los miembros de las Corporaciones locales tienen derecho a obtener del Alcalde o Presidente o de la Comisión de Gobierno cuantos antecedentes, datos o informaciones obren en poder de los servicios de la Corporación y resulten precisos para el desarrollo de su función". Es decir, que como son parte del Ayuntamiento de Madrid, no les compete la Ley de Protección de Datos, al igual que a un funcionario de Hacienda no le aplica a la hora de revisar, por ejemplo, el dato fiscal de un ciudadano. Eso sí, tienen la obligación y el deber de proteger esos datos personales.
Sin embargo, y al revisar la inspección que se hizo en la vivienda, se encontró con numerosas trabas e incluso partes "mutiladas", tal y como denunció en declaraciones a este medio el edil socialista.
Tal y como desveló en exclusiva este medio, Alberto González Amador realizó sin licencia las obras de su casa, motivo por el cual las obras fueron paralizadas en dos ocasiones. La pareja de Ayuso hizo caso omiso a las advertencias del Ayuntamiento y realizó las obras provocando incluso dos inundaciones en el edificio. A mediados de mayo el Ayuntamiento realizó una inspección in situ certificando que la obra era ilegal.
El novio de Ayuso compró el inmueble ubicado en la zona de Chamberí en verano del año 2022, justo después de haber cometido dos delitos que fraude fiscal que el propio González Amador ha confesado y por los que ahora se le investiga. Justo después inició las obras.
Para ello, hizo una declaración responsable anunciando que iba a realizar una reforma pero que fue revocada dos veces. Esa resolución que partía de la Junta Municipal de Chamberí acabó con la carrera política del concejal encargado del distrito, al que se le encontró acomodo en Calle 30, y supuso el fin del trabajo en ese departamento de la funcionaria que firmó esos expedientes de paralización. Fuentes del PP de Madrid señalaban que el concejal dejó la política activa a modo de "represalia".
Esta denuncia de Alberto González Amador se suma a la que el PSOE anunciaba este jueves a la vicealcaldesa de la ciudad, Inma Sanz, por revelación de secretos.