El Gobierno salva el impuesto a eléctricas y banca in extremis con un pacto con BNG, Bildu y ERC

El Gobierno salva el impuesto a eléctricas y banca in extremis con un pacto con BNG, Bildu y ERC

Acuerdan prorrogar un año más el impuesto a las empresas energéticas para salvar el proyecto de ley que incluye un nuevo tributo mínimo para las multinacionales.

María Jesús Montero, en el Congreso en una imagen de archivoEuropa Press via Getty Images

Finalmente, después de una jornada maratoniana de negociaciones en la Comisión de Hacienda del Congreso, el Gobierno ha cerrado in extremis un acuerdo con BNG, ERC y EH Bildu para prorrogar un año el impuesto extraordinario a las eléctricas y a la banca. El pacto con estos tres socios parlamentarios permite así salvar el proyecto de ley que transpone la directiva europea de aplicar a las multinacionales un tributo mínimo del 15%.

En un comunicado conjunto y después de horas de negociación en el Congreso, el pacto con las formaciones soberanistas contempla la presentación de un Decreto Ley en el que se prorrogue el impuesto a las grandes energéticas para 2025. Además, en la tramitación del proyecto de ley de la transposición europea, también se aseguran que se mantenga el impuesto a la banca, aunque con algunos cambios respecto a la fracasada propuesta que se rechazó horas antes en otra votación. Ahora, el planteamiento es el de elevar el tramo más alto del tributo extraordinario de los grandes bancos, cuya recaudación se gestionará desde las comunidades autónomas y las haciendas forales de País Vasco y Navarra.

Sin embargo, el acuerdo entre Gobierno, ERC, EH Bildu y BNG para mantener los tributos extraordinarios a las eléctricas y a la banca tiene algo más de simbólico que de realidad. El Congreso de los Diputados debe ratificar este jueves el texto aprobado en la Comisión de Hacienda y para que salga adelante, el Gobierno de coalición necesita todos los apoyos de sus socios parlamentarios si quiere lograr la mayoría necesaria para su aprobación. 

En esos apoyos se incluyen los votos de PNV, formación que pactó con el PSOE hace una semana que se eliminase el impuesto a las eléctricas; también necesita los de Podemos, que en un principio rechazaron la reforma fiscal si no se incluía el tributo a las energéticas y, por último, es necesario sumar los siete votos de Junts, quienes arrancaron un trato para que se aprobase su derogación por temor a que se produzcan fugas de capitales.

Hacienda mantiene el pacto con Junts

No obstante, el Ministerio de María Jesús Montero mantiene que el acuerdo firmado con Junts per Catalunya sigue vigente porque, como ha aclarado Hacienda una hora después de hacer público el pacto con ERC, Bildu y BNG, no se aplicará el tributo "a las empresas energéticas que mantengan su compromiso efectivo de inversión en descarbonización", ha aclarado en un comunicado en el que se intenta aclarar la aparente contradicción con el pacto que mantenía el Gobierno mantenía con la formación independentista.

Los de Carles Puigdemont, que aunque este martes han votado a favor de que se tramite el impuesto mínimo del 15% a las multinacionales, vuelven a tener la sartén por el mango y hasta la votación de este jueves tiene dos opciones: dar su apoyo al texto que ha salido de la Comisión de Hacienda o, como ya ocurrió en las votaciones sobre el techo de gasto o la proposición para limitar los alquileres temporales, votar en contra y tumbarlo.

En todo caso, la secretaria general de Podemos, Ione Belarra, ha advertido en 'X' que "está muy bien que el gobierno se comprometa a prorrogar el gravamen a las energéticas con ERC y Bildu, pero sin garantías de que Junts también lo apoyará es poco más que papel mojado", ha señalado la líder de la formación 'morada' en la red social de Elon Musk.

¿Qué es lo que sí se incluye en la reforma fiscal?

Después de ocho horas de caos en la Comisión de Hacienda, con los votos en contra de algunas propuestas y otros a favor de otras enmiendas, el Gobierno ha conseguido salvar una parte de la reforma fiscal planteada y que espera aprobar el jueves en el Congreso.

Entre las enmiendas aprobadas, destaca la subida de dos puntos porcentuales del IRPF para las rentas superiores a 300.000 euros, que pasan del 28% al 30%. También se ha aprobado un aumento de los impuestos sobre el tabaco, además de nuevos tributos para los vapeadores, en un esfuerzo por incrementar los ingresos y fomentar la salud pública.

Además, se introducen cambios normativos para combatir el fraude fiscal en el sector de hidrocarburos y mitigar los efectos de la anulación por parte del Tribunal Constitucional de las reformas del impuesto de sociedades impulsadas por el PP. Esos cambios incluyen la limitación de la compensación de bases imponibles negativas y de las deducciones por doble imposición.

El paquete de enmiendas también contempla mejoras en la tributación de cooperativas, con una reducción del impuesto de sociedades para empresas que facturen menos de un millón de euros. Asimismo, se impulsará una modificación de la directiva europea del IVA para gravar los alquileres turísticos y fomentar el uso de factura electrónica. En el ámbito artístico, mejora la tributación de actividades culturales y se introduce la bonificación de las cuotas a la Seguridad Social de clubes y asociaciones deportivas sin ánimo de lucro.

El proyecto de ley aprobada en la Comisión de Hacienda pasa ahora al Pleno. Si el jueves se produce un eventual rechazo de la normativa, supondrá un importante retraso en la transposición de la directiva europea del impuesto a las multinacionales, que ya va fuera de plazo y el más que probable riesgo de sanción. Además, la negativa complicaría la llegada del quinto desembolso de los fondos europeos al que está ligado la reforma fiscal.