El alcalde de Móstoles se une a los vecinos en la guerra por la gasolinera
Vecinos y autoridades se oponen frontalmente a la construcción de una estación de servicio 24 horas en un barrio residencial.
El municipio madrileño de Móstoles se encuentra en estos momentos inmerso en una lucha contra en la que tanto sus ciudadanos como el propio alcalde se encuentran en el mismo barco, al considerarla una situación que "acarreará muchos problemas".
El objeto de esta guerra es la construcción de una gasolinera en la avenida Iker Casillas con la calle Benito Pérez Galdós. Según apuntó su alcalde, Manuel Bautista (PP) en una entrevista a Europa Press, se trata de una decisión con la que no están de acuerdo pero en la que ni el pueblo ni él mismo tendrán la última palabra.
"A día de hoy la licencia no está todavía concedida. Nosotros estamos tratando de agarrarnos a cualquier resquicio legal para tratar de no dar esa licencia porque no nos gusta la gasolinera ahí, pero tendremos que hacer al final lo que lo que la normativa nos indica claro", explicó el regidor.
Por el momento y pese a su posicionamiento, el alcalde reconoce que hasta el momento, todos los informes prescriptivos que tiene la estación de servicio "son positivos". "Nosotros lo que no vamos a hacer es prevaricar. Si se dan todos los informes positivos le tendremos que dar la licencia, aunque estemos en contra", afirmó.
Por su parte, los vecinos se han agrupado en la plataforma 'No a la gasolinera', al considerar que "acarreará muchos problemas en el barrio". Entre ellos enumeran el aumento de la contaminación debido al trasiego de coches, "el incremento en la emisión de gases innecesarios" o la "devaluación de la zona".
La postura de todo el municipio es clara y desde la alcaldía prometieron a todos los ciudadanos que "agotarían todos los recursos que estuvieran a su disposición" para evitar su construcción, ya que, en palabras de Bautista, "no nos gusta esa gasolinera ahí".
Con el objetivo de que situaciones como estas no se vuelvan a repetir en el municipio, desde el consistorio ya se están llevando a cabo medidas para cambiar la ordenanza. "Nosotros vamos a cambiar normativamente eso porque creemos que una gasolina no puede estar a 20 metros", concluyó.