El acto que Feijóo no planeó y al que quiere sacar partido para su investidura
El líder popular busca que la manifestación promovida por Aznar y Ayuso, que ha terminado siendo un mitin del PP, sea un gran evento a mayor gloria de su figura.
- Acto del PP contra la amnistía en directo: última hora de la manifestación en Madrid
"Es preciso activar todas esas energías que en el marco de una contienda democrática y de afirmación del estado de Derecho tiene que plantar cara con toda la determinación, a un plan que quiere acabar con la Constitución (...) Hay que decir de nuevo ¡Basta ya! España no va a volver a un sistema basado en la exclusión, en el sectarismo, ni en la destrucción programada de la nación".
Palabra de Aznar, te alabamos señor.
Porque poco tardó Ayuso en sumarse a la movilización contra una eventual amnistía que reclamó el expresidente del Gobierno el pasado 12 de septiembre en un discurso ante su fundación, FAES.
"Ahí estaré", escribió la presidenta madrileña en un breve tuit tras ser convocada una marcha por Sociedad Civil Catalana para el 8 de octubre en Barcelona:
Ese día, los cimientos de la estrategia de Génova temblaron. De repente, las manifestaciones volvían a estar sobre la mesa. ¿Qué debía hacer la dirección del PP? Tal y como contó este periódico, el primer impulso fue esperar, ver qué pasaba con la amnistía y no descartar ningún escenario. Mientras, desde Moncloa tildaban a Aznar de "golpista" por sus palabras.
Pero el riesgo de repetir la foto de Colón —esa de la que sólo queda 'vivo' Abascal, líder de Vox— era grande. “No podemos quemar ya todos los cartuchos, aún no sabemos con certeza qué está negociando el Ejecutivo, hasta dónde está dispuesto a llegar", señalaba un presidente autonómico a El HuffPost.
Sin embargo, apenas 24 horas después Cuca Gamarra, secretaria general del partido, anunciaba en Espejo Público (Antena 3) que el PP se movilizaría tal y como reclamó Aznar. “El PP va a impulsar un gran acto en Madrid, que será abierto si el tiempo lo permite, para que la sociedad pueda participar y expresar su rechazo a cualquier instrumento que, al margen de la ley, se quiera plantear con el único objetivo de conseguir una serie de votos que se necesitan para perpetuarse en el poder”.
La fecha, el 24 de septiembre, dos días antes del debate de investidura del líder del PP, Alberto Núñez Feijóo. El lugar, la plaza de España. Un lugar abierto. Un acto abierto. Y la posibilidad de que se unieran otros partidos como Vox.
Sin embargo, con el paso de los días aquella manifestación, aquel evento abierto a todos, se fue modulando en un acto de partido al que estaban invitados a pasarse "los ciudadanos", pero oficialmente ninguna formación política más. En definitiva, un mitin del PP que, además, cambió de ubicación. De la Plaza de España a un lugar más pequeño y más concentrado: la plaza de Felipe II, frente al Wizink Center, donde el PP ha celebrado numerosos actos electorales, especialmente con Isabel Díaz Ayuso como protagonista.
Precisamente el protagonismo de Ayuso era otro de los problemas que encontraban en Génova respecto a este evento. Que se repitiera lo que ya sucedió en la noche electoral, cuando los simpatizantes y afiliados comenzaron a corear el nombre de la presidenta madrileña, es algo que se pretendía evitar.
Por eso, como también contó El HuffPost, desde la dirección del PP quisieron darle la vuelta al asunto y convertirlo en un masivo acto, no sólo de protesta contra la amnistía, sino de apoyo al proyecto de Feijóo. “No puede ser una loa a Ayuso, tiene que ser un acto de respaldo a Feijóo”, indicaba un líder territorial. "Cuando se ha decidido que sea un acto del PP, no podemos pinchar. Tiene que ser un acto muy potente, de fortaleza del partido y de Feijóo”, aseguraban desde el PP hace unos días.
Para lograr esa imagen, el acto se ha blindado y bien blindado. Para empezar, Ayuso tendrá un protagonismo limitad. Abrirá el evento junto con el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, pero sólo para saludar y hacer los honores. Después llegará el turno de los dos expresidentes del Gobierno del PP: José María Aznar, muñidor de todo esto, y Mariano Rajoy, que últimamente no se pierde un respaldo a Feijóo. Será el líder del partido el que cierre la fiesta, a la que acudirán prácticamente todos los barones del PP que, además, han movilizado autobuses para que no quepa un alma en el lugar.
De este modo, al acto con el que Feijóo no contaba, que para colmo se celebrará dos días antes de su investidura, el presidente 'popular' le ha dado la vuelta a su favor. Allí alzará la voz contra Sánchez, se presentará como alternativa a esa 'cesión' a los nacionalistas —o él o amnistía— y esbozará alguna de las líneas que desarrollará dos días después, no muy lejos de allí, en el Congreso durante su discurso de investidura.