Edmundo González rompe el argumentario del PP: "No hubo presión del Gobierno"

Edmundo González rompe el argumentario del PP: "No hubo presión del Gobierno"

Esteban González Pons aseguraba que el Gobierno había ejercido "coacción" con Edmundo González y que el Gobierno estaba "implicado en el golpe de Estado" en Venezuela.

Feijóo, junto a Edmundo GonzálezEFE

Ni hubo presiones ni extorsión. El líder opositor venezolano Edmundo González ha desmentido en un comunicado que el Estado haya presionado o coaccionado para que firmara el documento por el que reconoce que Nicolás Maduro fue el ganador de las elecciones del 28 de julio a cambio de poder abandonar el país tras varias semanas cobijado por la embajada holandesa.

"Ante las diversas versiones que circulan respecto a una supuesta coacción ejercida por funcionarios del Estado español, incluyendo al Embajador Ramón Santos, hacia mi persona, deseo aclarar lo siguiente: No he sido coaccionado ni por el Gobierno de España ni por el Embajador español en Venezuela", indica.

"Las gestiones diplomáticas realizadas tuvieron como único propósito facilitar mi salida del país, sin ejercer ningún tipo de presión sobre mí", explica sobre el papel que ha tenido el Ejecutivo español en su salida y explicando que solo se comprometieron a garantizar su seguridad durante el desplazamiento hasta el Falcon que le trajo hasta España así como el trámite de asilo.

"Quiero subrayar que dichas gestiones fueron supervisadas y facilitadas directamente por el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, asegurando en todo momento mi bienestar y libertad de decisión", agregaba para aclarar uno de los temas del día después de que el responsable de la acción exterior del Partido Popular, Esteban González Pons, asegurara que el Gobierno había ejercido "coacción" con Edmundo González y que el Gobierno estaba "implicado en el golpe de Estado" en Venezuela.

"Con esta declaración, espero aclarar cualquier duda o malentendido respecto a la naturaleza de mi traslado y reiterar mi agradecimiento a las autoridades españolas por su apoyo y compromiso con la protección de los Derechos Humanos", ha zanjado al respecto.

Al comunicado ha reaccionado casi de manera inmediata el titular de Asuntos Exteriores agradeciendo la aclaración y a la que se ha sumado la práctica totalidad del Consejo de Ministros. "Gracias Edmundo González por defender la verdad frente a las calumnias e injurias contra España y su servicio exterior. Hay momentos para ser oposición y otros en los que hay que ser un solo país. España está comprometida con la democracia y derechos humanos", publicaba.

PP y PSOE han protagonizado el gran enfrentamiento de este jueves después de las palabras de Esteban González Pons donde aseguró que se documento se firmó "bajo coacciones", lo que según el eurodiputado popular evidenciaba una complicidad de España con el régimen chavista ya que la firma fue en la residencia del embajador español y estaba presente la vicepresidenta venezolana, Delcy Rodríguez. "El Gobierno de España está implicado en el golpe de Estado en Venezuela", ha llegado a decir asegurando que Sánchez favorece la permanencia de Maduro en el poder.

Desde el PSOE, el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, reaccionaba enérgicamente desde Bruselas, exigiendo a Alberto Núñez Feijóo que desautorice las declaraciones de González Pons. Albares ha calificado las acusaciones como "injuriosas" y "absurdas", afirmando que "España no ha participado en ninguna negociación entre Edmundo González y el Gobierno de Venezuela". Además, destacaba que el propio González Urrutia había agradecido la labor del Gobierno español.

Al margen del debate, el abogado de González Urrutia, José Vicente Haro, había desmentido a primera hora de la tarde cualquier implicación del Gobierno español en un supuesto golpe de Estado.

Feijóo, desde Italia y con su reunión con Meloni opacada, se veía obligado a responder a lo que unas horas antes había dicho su compañero de filas. De esta forma, pedía la dimisión de José Manuel Albares por las “coacciones” al candidato opositor en la embajada española en Caracas. Lo hacía a su vez compareciendo junto al ministro de Exteriores italiano, Antonio Tajani, colega comunitario del titular español.

"En la embajada española se ha coaccionado al presidente electo de Venezuela y que esté el ministro de Exteriores relacionado con esto es inadmisible", añadía. Así, aseguraba que Pedro Sánchez debe reemplazar al embajador en Venezuela y comparecer para dar explicaciones sobre el asunto ante las “evidencias” de que “la embajada española ha sido "escenario de prácticas mafiosas”.

Hablando directamente a Tajani Feijóo aprovechaba para plantear varias “preguntas retóricas”: “¿Se imagina que dos altos cargos de una dictadura entraran en una embajada italiana para coaccionar al presidente electo de un país? ¿Le cabe en la cabeza que esta coacción se hiciera con el conocimiento del presidente del Gobierno y el ministro de Exteriores?".