El desenlace en Ourense: el PP y Jácome vuelven a repartirse Alcaldía y Deputación

Y se repitió la "carambola" de 2019. En un desenlace a todas luces inesperado, el gran culebrón político gallego de este sábado, en el que se conforma la mayoría de ayuntamientos españoles, se ha saldado con una suerte de cambio de cromos entre el PP y Democracia Ourensana (DO). La formación provincialista que lidera el polémico regidor Gonzalo-Pérez Jácome ha suscrito un pacto de última hora con los populares de Manuel Cabezas por el que el alcalde en funciones retendrá el bastón de mando y el PP no perderá la Deputación. 

Ambos se han comprometido a dejar gobernar a la fuerza más votada, tanto en el Ayuntamiento como en la Diputación, por lo que votarán por su propio candidato en la constitución de ambas corporaciones. Según ha recogido Europa Press, que ha tenido acceso al contenido del acuerdo, Jácome se queda en la alcaldía, pero deja vía libre a un PP tocado cuyo histórico presidente del organismo provincial, Manuel Baltar, renunciaba al acta de concejal y, en la práctica, a presidir la misma Deputación que su padre gobernó durante más de dos décadas, antes que él.

Lo cierto es que el anuncio ha llegado in extremis y tras otro giro inesperado obra del PP. Antes de trascender el acuerdo, Jácome había desvelado en Twitter que él y los representantes vinculados a Democracia Ourensana apostaban por votarse a sí mismos tanto en la constitución del Ayuntamiento como en la Deputación de Ourense.

"Los representantes de Democracia Ourensana se votarán a sí mismos en la constitución del Ayuntamiento y la Diputación de Ourense. Por lo tanto, en esta ocasión, el peso de las listas más votadas será determinante en la investidura de ambas corporaciones", anunció. Y solo unos minutos después, era el PP el que anunciaba la misma posición, eso sí, asegurando que se debía "ante la imposibilidad de llegar a un acuerdo" para formar un ejecutivo alternativo al de Jácome. 

A pesar de los audios filtrados y la salida de Baltar (PP)

Lo firmado hoy se trata de un movimiento muy similar al ocurrido en 2019, en el que Jácome se convirtió en alcalde de Ourense con el permiso de los populares, a pesar de que la lista más votada en la ciudad de As Burgas fue la del PSOE. Con todo, en esta ocasión hay distintos factores que hacen más significativo este pacto. El primero tuvo lugar semanas antes de los comicios municipales, con la salida a la luz de distintos audios desvelados por La Región, en los que se recogen conversaciones que sugieren un presunto caso de corrupción por parte de Jácome. 

Desde que se conocieron esas grabaciones, las distintas fuerzas de la oposición entablaron contactos y conversaciones y se llegó a sugerir una suerte de 'cordón sanitario' para evitar que Jácome, este 28-M ya convertido en el candidato más votado, se quedase fuera de la Alcaldía. Es más, hace solo 24 horas, Cabezas (PP) propuso entregarle el bastón al PSOE -posibilidad que el BNG no veía con buenos ojos- para dejar fuera a Jácome. 

Esta decisión que en la práctica supone repetir lo ocurrido en la anterior investidura, ya ha recibido una firme crítica desde el socialismo gallego. "El PP ayer ofreció sus votos para apoyar al PSOE para la alcaldía de Ourense, hoy firma por escrito un acuerdo con Jácome. Hay un acuerdo escrito, es un hecho", ha aseverado el secretario de Organización del PSdeG, José Manuel Lage.

"Lo que no son cuentos, son cuentas y está claro que el PP prefirió pactar con Jácome y no hacer alcalde a Paco Rodríguez cuando tuvieron conocimiento de que el BNG estaba dispuesto a unir sus votos", ha lamentado Lage.