De Defensa a Transportes: así se compra suelo entre ministerios para hacer viviendas públicas
No puede ser una cesión simbólica, sino que su precio deberá quedar fijado por una tasación independiente según el valor del mercado
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció este martes en el Senado la construcción de 20.000 nuevas viviendas públicas y de alquiler asequible en terrenos propiedad del Ministerio de Defensa. Esta promesa, sumada a las viviendas anunciadas a través de la SAREB, las financiadas con créditos ICO y las proyectadas por el Ministerio de Transportes, hacen un total de 113.000 inmuebles que supuestamente van a ser destinados a vivienda pública en España para paliar los problemas de acceso al alquiler o la compraventa de pisos.
Pero Defensa, titular actual de ese suelo para las 20.000 nuevas viviendas, no puede cederlo gratuitamente al Ministerio de Transportes, quien se encarga de los asuntos relacionados con la vivienda. La cartera dirigida por Raquel Sánchez tendrá que comprarlo con dinero público después de una tasación independiente para establecer un precio según el valor del mercado. De esta operación se encargaría este mismo ministerio a través de la Sociedad Pública Empresarial de Suelo (SEPES), un organismo adscrito a él que se configura como el principal operador de suelo público de ámbito nacional.
Pero, ¿qué es SEPES? Según queda definido en su propia web, su misión consiste en "fomentar el reequilibrio social y económico de todo el territorio español a través de la promoción, adquisición y preparación de suelo para usos residenciales, industriales, terciarios y de servicios". Para ello, elabora los proyectos de urbanización y se encarga de la ejecución de las infraestructuras urbanísticas necesarias.
Asimismo, y cuando se lo encomiendan las Administraciones competentes, SEPES realiza actuaciones en materia de vivienda protegida, mediante la promoción de suelo residencial y, en ocasiones, a través de la edificación de las viviendas necesarias. En la actualidad, SEPES participa a petición del Ministerio en el “Plan de Viviendas para el Alquiler Asequible” cuyo objeto es el incremento del parque de viviendas en alquiler a precios asequibles o sociales, para personas o unidades de convivencia con ingresos limitados en aquellos ámbitos en los que el mercado esté especialmente tensionado.
Un ejemplo reciente de este plan es la 'operación Campamento' de Madrid, para la cual el Ministerio encabezado por Raquel Sánchez ya ha aprobado transferir 260 millones de euros adicionales con el objetivo de comprar terrenos a Defensa en esa ubicación. Actualmente, el organismo es dueño de 243.922 m2 de los suelos de Campamento, lo que supone un 12% de ese futuro barrio. Así, tras el pago, la entidad dependiente del ministerio será propietaria de más del 93% de los terrenos. La operación conllevará impulsar un número aproximado de 12.000 casas, siendo el 60% de vivienda protegida pública y el 40% de libre. En las últimas semanas, Defensa también ha llegado a acuerdos con el Ayuntamiento de Getafe y con SEPES para la cesión de terrenos de la base aérea de la ciudad del sur de Madrid y del cuartel de Son Busquets, en Palma de Mallorca.
Toda esta promoción de viviendas, sin embargo, estarían fuera del cálculo de las 20.000 nuevas que prometió Sánchez. Pero para que SEPES pueda construir estas casas en los terrenos del Ministerio de Defensa primero se tienen que adquirir, ya que la ley no permite la cesión sin que haya una contraprestación económica. Además, el precio no podrá ser simbólico, sino que su valor deberá estar sujeto al precio del mercado a través de una tasación independiente.
Pese a todo, el Instituto de la Vivienda, Infraestructura y Equipamiento de la Defensa (Inviev) lleva ya varios meses negociando con la SEPES sobre el valor de ese suelo y ya hay un acuerdo por el lote completo de terrenos. La cifra, sin embargo, no ha sido revelada.
La operación irá pronto al Consejo de Ministros, según ha adelantado este miércoles la ministra Margarita Robles. Se trata de suelo que el Ministerio de Defensa no utiliza desde hace años y que ya carece de interés para la defensa nacional. Es más, supone una importante carga económica para su cartera debido al mantenimiento. La venta permitirá a las Fuerzas Armadas dedicar ese dinero "a necesidades de la defensa nacional". Una vez adquirido el suelo, será SEPES quien lleve a cabo las negociaciones oportunas con las comunidades autónomas y los ayuntamientos para vender esos terrenos o para intercambiarlos, previo convenio, por otros.
De momento, el Gobierno no ha revelado en qué zonas se encontrarían ubicados esos terrenos ni cuando estarían listos los inmuebles prometidos, dado que hay que licitar las obras y proceder a la construcción y promoción de las mismas. Un proceso que, obviamente, se extenderá durante varios años.