Contradicción Canaria: todos los cambios de opinión de CC sobre su apoyo a Sánchez

Coalición Canaria juega al despiste. El partido liderado por Fernando Clavijo lleva más de dos meses confundiendo sobre la posibilidad de votar a favor de la investidura de Pedro Sánchez, con vetos, declaraciones contradictorias de sus dirigentes, vaivenes de izquierda a derecha y una incertidumbre prolongada que puede ser determinante. Si el partido canario respalda al líder socialista, sólo sería necesaria la abstención de Junts para obtener la confianza de la Cámara con una mayoría simple. 

La formación denominada 'nacionalista' sabe que su único escaño en el Congreso, representado en Cristina Valido, puede valer oro en un hemiciclo totalmente ajustado y polarizado. Por eso, no duda en dejarse tentar por el PSOE mientras vota a favor de la investidura de Alberto Núñez Feijóo junto a Vox y UPN. 

Los canarios defendieron su decisión de apoyar al líder del PP argumentando que ellos no son "de derechas", pero que sí respaldan a quienes se muestren "comprometidos" con las islas. “No hay cuestiones ideológicas. Pactar con alguien no supone asumir su ideología”, señalaba Valido desde la tribuna.

Coalición Canaria "no es de derechas", pero gobierna en la región gracias al apoyo del PP y relegando al PSOE, la primera fuerza, a la oposición. En el Congreso, por su parte, ha respaldado medidas tan importantes y significativas del denominado "gobierno progresista" como la reforma laboral, la ley trans, la ley del "sólo sí es sí" o los últimos Presupuestos del Ejecutivo. 

Tras las elecciones del 23-J, Valido ya dejaba en la SER la puerta abierta a negociar con Sánchez su investidura. Eso sí, imponía una línea roja: que en su nuevo gobierno no estuviera la "extrema izquierda". Es decir, que no contara con ministros de Sumar. Una máxima que extendía también a Vox en el caso de apoyar a Feijóo. 

Sin embargo, cuando se le preguntaba si Abascal y Díaz representaban lo mismo, Valido matizaba: "Nosotros siempre nos hemos movido en la centralidad. Con la ultraderecha mantenemos una distancia mucho mayor, puesto que con Yolanda Díaz hemos apoyado por ejemplo la subida del Salario Mínimo Interprofesional o la actualización de las pensiones conforme al IPC". Es decir, 'vetaba' a Díaz pese a que ella misma reconocía que habían apoyado las principales aportaciones de la ministra de Trabajo y de otros ministros procedentes de Podemos, como Irene Montero. 

Una semana después, a través de un comunicado, CC volvía a imponer como "línea roja" la formación de un "gobierno integrado por la extrema derecha o izquierda" e incidía en que su "apoyo al futuro presidente del Gobierno dependerá siempre de una condición que para Coalición Canaria es firme e inamovible: la defensa de Canarias". Al mismo tiempo, eso sí, incorporaban a Vox a la Junta de Gobierno del municipio de Teguise (Lanzarote) para gestionar la Policía Local, Protección Civil y Tráfico. A Coalición Canaria se le indigestaban sus propias condiciones.  

Una vez que se constituyó el nuevo Congreso, el partido canario comenzó a olvidarse de los vetos a Sumar. Sin decirlo de forma expresa, la presencia de Yolanda Díaz y de otros nombres de su formación en el gobierno no parecía ser ya un escollo. A cambio, reclamaban que se cumpliera la "agenda canaria" y se hiciera efectiva la transferencia de unos de 200 millones de euros del Gobierno canario al central, según el compromiso adquirido por Sánchez para que Coalición Canaria apoyase las cuentas de 2023. En ese monto se encuentran cuantías en concepto de ayudas para la isla de la Palma, universidades y también transporte de mercancías.

En estos últimos días, se ha dado la paradoja de que ha sido Coalición Canaria quien ha apremiado al PSOE a negociar su apoyo. El pasado lunes, después verse con el rey, Valido se quejaba de que ningún negociador socialista se había puesto en contacto con ellos. "Nos gustaría esperar a ver si el PSOE quiere un acuerdo con CC, si quiere sentarse y si acepta lo que pedimos, y también tener información de cuáles son sus planteamientos", decía. 

Valido ya dejaba caer entonces que ni Sumar y la posible amnistía para los involucrados en el procés serían un obstáculo, como así afirmaban en un pasado no muy lejano. "Estamos aquí para solucionar los problemas de Canarias y ése es el objetivo primero y el motivo por el que los canarios me votan. Por tanto, tendremos que decidir si una vez que tengamos un acuerdo y una garantía de que se responde a las demandas de los canarios, podemos plantearnos un apoyo (a Sánchez) aunque se nos diga que eso (la amnistía) va implícito", decía. 

Y este jueves, el presidente canario y secretario general del partido, Fernando Clavijo, ofrecía directamente el voto a Sánchez a cambio de cumplir con la agenda canaria y de que Junts no sea esencial para la investidura. "Queremos ser el llavín de la gobernabilidad", expresaba de forma contundente. Sin vetos ni líneas rojas. Ahora, les queda esperar a la llamada del PSOE. La pelota está en el tejado de Sánchez.