Sánchez pide "arrimar el hombro" a sus líderes territoriales y unidad "para dar un horizonte de optimismo" a España
El presidente del Gobierno ha vivido un cónclave de tensión tras las duras palabras del presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, contra el acuerdo con ERC. Pese a ello, anticipa que "hay Gobierno para largo".
Un Comité Federal bastante movidito. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha vivido un cónclave socialista de mucha tensión. Antes de que arrancara, desde la calle Ferraz, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha disipado cualquier duda de que iba a ser una reunión y más y ha sido muy duro con el acuerdo entre PSC y ERC en Cataluña.
El líder del Ejecutivo ha tratado de echar tierra de por medio desde el primer minuto de su intervención ha defendido el acuerdo y ha puesto en valor la investidura de Salvador Illa como presidente de la Generalitat.
"Hasta hace no mucho tiempo la gente hablaba en Cataluña de ruptura. Hay que pensar en cuantas oportunidades pérdidas ha habido. Hoy se ha reconstruido la convivencia. Hoy hay un presidente de la Generalitat que trabaja por el interés de los ciudadanos", ha asegurado.
Una "nueva etapa autonómica"
El líder del Ejecutivo ha hablado de la financiación autonómica y ha comparado lo que ha hecho su Gobierno y lo que hizo el de Mariano Rajoy. "El Gobierno habrá transferido, entre 2018 y 2025, 300.000 millones de euros, un 32% más de lo que transfirió el Gobierno de Mariano Rajoy", ha detallado.
Sánchez se ha quejado de “los regalos fiscales” que se dan en comunidades como la Comunidad de Madrid. “Uno de cada tres euro que el Gobierno transfiere, sirve para ese fin. Esa es la verdad de los datos. La pregunta que hago es, ¿qué mayor insolidaridad que el hecho de que haya gobiernos autonómicos que derivan el dinero del Estado al bolsillo de los que más tienen?”, ha criticado.
Durante su intervención, Pedro Sánchez ha explicado que la "coartada" de la derecha es la financiación autonómica, con la que, según ha dicho, "pretenden ocultar su proyecto neoliberal".
El líder del Ejecutivo ha recordado su anuncio de duplicar los recursos del Fondo de Compensación Interterritorial, reivindicando el dinero transferido a las comunidades desde que es presidente: "En financiación autonómica, el verdadero debate no es entre territorios, sino entre modelos".
El presidente de Gobierno ha servido su "mano tendida" a los líderes autonómicos para reunirse bilateralmente con él en Moncloa, pese a los avisos de algunos dirigentes populares. "Dialoguemos, intercambiemos propuestas, construyamos juntos y pactemos", ha interpelado.
Quiere seguir al frente del PSOE
Después de pedir a todos los barones territoriales del PSOE que toca "arrimar el hombro", ha anunciado que es el momento de dar un paso al frente. "Os quiero anunciar que presentaré mi reelección a la secretaria general del PSOE. Quiero que los socialistas nos unamos para dar un horizonte de optimismo", ha razonado.
"Parece que lo que da audiencia es seguir a unos agonías y vaticinar tragedias que no llegan a producirse. Debemos, entre todos, volver a poner de moda el optimismo en nuestro país", ha razonado.
Sánchez ha defendido que "hay Gobierno para largo" y que "estamos listos para esta nueva etapa". "Tenemos las pilas cargadas, nuevas ideas y las prioridades bien definidas. El conformismo y el inmovilismo se lo dejamos a quiénes nada tienen que ofrecer a España salvo su agonía", ha expuesto.
Page, muy crítico
A su entrada en Ferraz, Page ha sido el líder territorial socialista más duro. Ha reclamado a la dirección "una copia del acuerdo firmado con ERC". "Todavía no he visto un documento. Si me lo dan, no hace falta que me den explicaciones. Es un cupón independentista y el cupón para la independencia", ha asegurado.
"Llama la atención que nadie lo haya mostrado. Ese documento es mucho más egoísta que socialista. Es, francamente, incomprensible e indefendible. Este partido se fundó para combatir los privilegios. Es un momento de preocupación. Sabemos lo que hay, no creo que haya muchos tontos en este país que se traguen cuentos. Es un documento que es grave desde la perspectiva constitucional y desde los valores socialistas", ha defendido.
Page ha justificado que "no se puede poner patas arriba los consensos constitucionales" y ha destacado que "es muchísimo más importante y grande la militancia, que los dirigentes de hoy, de mañana y del pasado". "Hay que entender que una parte importante de la militancia consiste en la autocrítica. Una condición necesaria para la izquierda", ha reiterado.