Borrell insiste en la solución de los dos estados para llevar una "paz justa" a Oriente Próximo

Borrell insiste en la solución de los dos estados para llevar una "paz justa" a Oriente Próximo

Asegura que Netanyahu es "la más firme garantía para que nunca haya Estado para Palestina".

El Alto Representante de Política Exterior y Seguridad para la UE, Josep Borrell, en una imagen de archivo.Alberto Ortega/Europa Press via Getty Images

Josep Borrell, alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad y vicepresidente de la Comisión Europea, ha afirmado que solo un acuerdo político puede solucionar el conflicto en Oriente Próximo y ha abogado por "dar los primeros pasos" hacia una paz "justa" que concibe como "única garantía de seguridad a largo plazo" y que "no será fácil".

Borrell ha clausurado, de manera telemática, la jornada para abordar la situación humanitaria en Gaza, organizada por las asociaciones Hoy por ti y Juezas y Jueces por la Democracia en Vigo, en la que se ha preguntado si Israel está cumpliendo el derecho internacional y ha añadido que "la respuesta, siempre compleja, no sería muy favorable" hacia ese Estado.

El representante de la UE ha contextualizado que la guerra en Gaza supera ya el año y es la "más larga de la historia" de Israel y ha recordado que esta etapa del conflicto empezó con el ataque terrorista de Hamás.

"No se puede justificar lo que ocurrió el 7 de octubre de 2023 y que la Unión Europea ha condenado firmemente", ha relatado antes de avanzar hacia lo que ha pasado desde entonces, que es "otro horror".

"Un horror no puede justificar otro, y se ha multiplicado por 10, quizás por 50 y aumenta cada día", ha apuntado Borrell, quien ha advertido de que en este momento, además, "el nivel de ayuda humanitaria es el más bajo desde que empezó la guerra", con una "política deliberada de limitarla".

También ha abordado el conflicto en la frontera con el Líbano, donde "se repite la historia" con el lanzamiento de cohetes de Hizbulá y la respuesta de Israel y más muertos en dos semanas que en la "devastadora guerra de 2006".

Aunque ha sostenido que Israel, "como cualquier nación agredida tiene derecho a defenderse", también ha advertido de que esa defensa "tiene sus límites y la cuestión es si se han rebasado" en este caso.

Borrell ha comentado que "a veces no se le quiere dar respuesta a esa pregunta" pero ha deslizado que "el uso desproporcionado de la fuerza que el ejército de Israel está desplegando" en Gaza, Cisjordania o el Líbano "no es buena señal".

Tras volver a cuestionarse si está cumpliendo con el derecho internacional, ha sugerido que "la respuesta, siempre compleja, no sería muy favorable" hacia Israel.

El alto representante de la UE ha considerado que "solo un acuerdo político que permita construir la paz" y que esté "basado en el reconocimiento mutuo de unos y otros", en referencia a los dos Estados, puede dar a Israel "la seguridad que busca" y que "no va a venir de una guerra permanente".

Eso pasa por un Estado para cada uno de los dos pueblos, pero ha recordado que Israel ya lo tiene y que su primer ministro, Benjamín Netanyahu, no quiere que Palestina lo tenga.

"Él se presenta como la más firme garantía para que nunca haya Estado para Palestina", ha sentenciado Borrell, quien ha defendido que esa postura de Israel no debe "impedir seguir trabajando" para conseguirlo.

Así, ha concluido que la "paz es la única garantía de seguridad a largo plazo" y que esa "paz justa en la región" no será "fácil", pero "hay que dar los primeros pasos".

Tras el vídeo de Borrell, la jornada ha concluido con un minuto de silencio por la paz en Palestina.

Antes de la intervención del alto representante europeo, Óscar Camps, fundador y director de la ONG Open Arms, ha contado la dificultad que tuvieron para poder llevar comida a Gaza cuando se anunció la apertura de un corredor humanitario, para lo que llegaron a levantar un muelle.

Titania
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Santander

Por su parte, la Coordinadora Galega en Solidariedade con Palestina protagonizó en el exterior de Afundación una acción simbólica para "denunciar la complicidad de la UE en el genocidio palestino" debido a la participación, telemática, de Borrell en la jornada.