Los mosquitos portadores de la malaria se expanden a una velocidad nunca vista
Un estudio de la Universidad de Georgetown concluye que el cambio climático es la causa de la expansión del mosquito Anopheles.
Los mosquitos Anopheles, portadores de la malaria, se movido hacia áreas cálidas durante más de un siglo en África. En concreto, según un nuevo estudio de la Universidad de Georgetown, se han propagado hacia el sur 4,7 kilómetros cada año, una velocidad unos dos o tres veces más rápida de lo que se había estimado hasta ahora.
El motivo es, según la investigación, el cambio climático. Este tipo de mosquito se han movido tanto que, en promedio, ahora se encuentran 500 kilómetros más cerca del polo sur, ha publicado National Geographic.
En este estudio se ha empleado el conjunto de datos más completo jamás compilados por entomólogos médicos para rastrear el alcance de la distribución de mosquitos en África durante 120 años. Así, los investigadores, liderados por el biólogo Colin Carlson, han podido estimar los límites de distribución de 22 especies de mosquitos Anopheles entre 1898 y 2016, un lapso de tiempo en el que el planeta Tierra se ha calentado al menos 1,2 ºC.
"Esto es exactamente lo que esperaríamos ver si el cambio climático está ayudando a estas especies a llegar a partes más frías del continente. Si los mosquitos se están extendiendo por estas zonas por primera vez, podría ayudar a explicar algunos cambios recientes en la transmisión de la malaria que, de otro modo, han sido difíciles de rastrear hasta el clima", ha explicado Carlson.
El papel determinante del clima
Hasta ahora se había planteado que el cambio climático amplía el rango de distribución de los mosquitos y, además, prolonga el tiempo en el que estos insectos están presentes cada años. Con este estudio se prueba por primera vez que esto es así y se arroja luz a cómo las temperaturas han ampliado el hábitat de los mosquitos a lo largo de los años.
Estos insectos tienen una gran capacidad para desplazarse a grandes distancias volando aprovechando las corrientes de viento durante la noche. A pesar de esto, son animales de sangre fría altamente influenciados por la temperatura, la humedad y la lluvia. Por lo tanto, el clima es determinante en su supervivencia y distribución geográfica, según resalta el mismo medio.
Esta información es clave para una correcta distribución de los recursos de atención médica, según los investigadores. Pero no es olo la malaria lo que debería preocupar, resalta el medio. El mosquito Aedes transmite otros virus como el dengue, el chikungunya y el zika, que también se están propagando, según investigaciones previas de Carlson.
Cerca de mil millones de personas podrían estar en peligro de contraer enfermedades transmitidas por este mosquito a causa del aumento de las temperaturas. Esta cifra se suma a los miles de millones de personas que ya están en riesgo de contraer malaria.
La mortalidad debida a la malaria ha sido mayor que cualquier otra enfermedad en todo el mundo y, aunque las vacunas están en fase de desarrollo, todavía no hay ninguna disponible que sea completamente eficaz. Así, destaca el National Geographic, la malaria acaba con una vida cada 30 segundos, y el 75% de las víctimas son niños de menos de cinco años.