La misteriosa mancha blanca que baña el Mar Menor
Ha sido hallada por el equipo científico encargado del programa de monitorización del Mar Menor (BELICH).
El Mar Menor vuelve a acaparar las miradas. En esta ocasión, por una extraña mancha blanca. Así lo señala el último informe presentado por el Instituto Español de Oceanografía (IEO-CSIC).
En el mismo se precisa que el equipo científico encargado del programa de monitorización del Mar Menor (BELICH), ha detectado durante las últimas semanas una masa de agua de grandes dimensiones con una coloración blanquecina bastante anómala.
En consecuencia, los científicos han adecuado la red de muestreos periódicos para determinar su composición, monitorizar su evolución e investigar su posible origen.
“Como muestran las imágenes de satélite analizadas de los últimos meses, y de acuerdo con otros datos disponibles del seguimiento del Mar Menor, en la zona que ocupa la masa de agua identificada es habitual la presencia de proliferaciones fitoplanctónicas, pero no con la coloración, turbidez y extensión actuales”, resalta Juan Manuel Ruiz, investigador del IEO-CSIC y coordinador del equipo científico del proyecto BELICH responsables del informe.
En concreto, la masa de agua diferenciada ocupa una amplia área marina comprendida entre Los Alcázares, Los Urrutias y la isla Perdiguera, con unas dimensiones variables de unos 15 kilómetros cuadrados.
Valores de concentración de clorofila cuatro veces más elevados
Uno de los aspectos llamativos es que los valores de concentración de la clorofila registrados en su interior son hasta cuatro veces más elevados que en otras partes de la laguna, indicando una elevada producción primaria en su interior, la cual se ha mantenido más o menos estable a lo largo del tiempo, como se deduce de las imágenes de satélite analizadas.
Los resultados preliminares indican, a su vez, una alta concentración de materia orgánica en la zona, probablemente de origen planctónico, asociada a una elevada abundancia de picoplancton (células de entre 0,2 y 2 micrómetros de diámetro) y criptofíceas.
El equipo de expertos, además, apunta que por la distribución, extensión y dinámica de la masa de agua diferenciada, así como por sus características fisicoquímicas, los nutrientes que inducen la proliferación planctónica podrían tener un origen difuso.