Los científicos vaticinan "el fin" si sale el proyecto en uno de los humedales más grandes del mundo
El Pantanal podría desaparecer tal como lo conocemos si se aprueba la polémica construcción de una vía fluvial en el río Paraguay para el transporte de mercancías.
Decenas de científicos han lanzado una advertencia sobre las consecuencias que podría tener la construcción de una vía fluvial comercial en el Pantanal, uno de los humedales más grandes y con mayor diversidad del mundo, cuya superficie atraviesa la frontera de tres países: Brasil, Bolivia y Paraguay. La hidrovía Paraguay-Paraná, nombre del proyecto, pretende aprovechar 700 kilómetros del río Paraguay para crear una vía de transporte fluvial que, sin embargo, amenaza con transformar radicalmente este ecosistema único, poniendo en riesgo miles de hectáreas que podrían desaparecer por incendios forestales.
El Pantanal, que abarca una superficie casi equivalente a la mitad de Alemania, es un refugio de biodiversidad sin igual, hogar de especies tan emblemáticas como el jaguar, el guacamayo jacinto y más de 2.500 especies de plantas acuáticas. Sin embargo, el proyecto del gobierno brasileño para hacer navegable esta vía fluvial implica un enorme dragado o la construcción de varios puertos, obras que pueden alterar así el ciclo natural de las inundaciones del Pantanal, que es esencial para la supervivencia del ecosistema.
Según el profesor Karl M. Wantzen, ecólogo de la Universidad de Tours y presidente de la cátedra UNESCO para la cultura fluvial, el Pantanal “es un auténtico paraíso en la Tierra”. Wantzen y otros 40 científicos, explica el diario británico The Guardian, han publicado un estudio en la revista Science of the Total Environment en el que avisan que la ejecución de este proyecto podría significar “el fin del Pantanal, tal y como lo conocemos hoy”. Esta afirmación se basa en el riesgo que existe de que la reducción de la llanura de inundación, a la que se suma el cambio climático y el incremento de la superficie que se dedica a la actividad agrícola, aumenta el riesgo de que se puedan producir incendios devastadores, como los que ya arrasaron casi 1,5 millones de hectáreas en 2024.
Pierre Girard, investigador del Centro de Estudios del Pantanal en la Universidad Federal de Mato Grosso, ha expresado su preocupación por el impacto irreversible que tendría la autopista fluvial sobre el humedal del río Paraguay porque, apunta, no solo aceleraría la pérdida de superficie de agua que, desde 1985, se ha reducido cerca de un 80%, una cifra que convierte este ecosistema en el bioma más degradado de Brasil.
El proyecto de la hidrovía en el río Paraguay se ha impulsado debido a la gran expansión y el peso que han adquirido los el cultivo de soja en los últimos años. Este crecimiento, por otro lado, ha elevado las peticiones para que se construya una vía eficiente que permita el transporte de mercancías desde las zonas productoras de Brasil, Paraguay y Bolivia hasta los puertos costeros en Uruguay y Argentina. Los defensores del proyecto aseguran que el traslado de la mercancía a través de barcazas sería más rápido y económico que por carretera. Como alternativa, los investigadores sugieren que la ruta podría hacerse más sostenible si se construye un ferrocarril que evite el daño irreversible de la vía fluvial.
A pesar de las serias preocupaciones de la comunidad científica, el Ministerio de Puertos y Aeropuertos de Brasil ha despreciado estas advertencias, que considera "opiniones" sin "elementos científicos que las respalden". Sin embargo, los expertos seguirán haciendo campaña para frenar el proyecto, conscientes de que lo que está en juego es nada más y nada menos que la supervivencia de uno de los ecosistemas más valiosos del planeta en el que, por otro lado, viven grupos indígenas cuya subsistencia depende directamente del entorno del que se considera el último gran río de América del Sur.