El autoconsumo solar, el futuro de las empresas para un desarrollo sostenible
Aprovechar la energía solar se trata de una posibilidad cada vez más común.
El autoconsumo es una forma de producir tu propia energía eléctrica para el consumo personal. En el caso del autoconsumo solar implica que dicha energía se genera mediante placas solares. Según el informe de Pacto Mundial de la Red Española “Contribución de las empresas españolas a la Agenda 2030: resultados de la consulta empresarial sobre desarrollo sostenible”, en junio de 2022, el 55% de las empresas nacionales trabajan en el objetivo de consumo responsable, el 54% en el de energía asequible y no contaminante, y el 51% en el de acción por el clima. Para poder llevar a cabo esto, existen empresas especializadas que ayudan a otras entidades a generar su propia energía y reducir su factura a base en autoconsumo solar para empresas.
Por lo tanto, aprovechar la energía solar se trata de una posibilidad cada vez más común, puesto que actualmente tendemos hacia una energía verde, lo que implica evitar explotar los recursos naturales no renovables como pueden ser el petróleo o el carbón. La sostenibilidad y el compromiso con el medioambiente son algunos de los retos que gran cantidad de empresas tienen en mente.
Hay que tener en cuenta que hay dos tipos de autoconsumo. Por un lado, el autoconsumo directo en donde las placas solares están conectadas directamente a la instalación eléctrica, una solución idónea para grandes consumidores. Y, por otro lado, el autoconsumo con acumulación que es recomendado para viviendas y pequeños consumidores, ya que permite acumular la energía en baterías para utilizar en momentos donde más se necesite. Pese a sus ventajas, no todo el mundo tiene la capacidad de producir energía fotovoltaica. Aunque, afortunadamente, existen soluciones para obtener energía solar.
Algunos de estos objetivos se cumplen gracias al autoconsumo eléctrico, ya que permite producir energía renovable para el uso propio. Este sistema es beneficioso para el medioambiente, también implica un ahorro en los gastos eléctricos y una reducción en la dependencia sobre los precios de la electricidad.
Actualmente, muchas compañías se apuntan a la estrategia del autoconsumo a partir de las placas solares, un dispositivo que aprovecha la energía del sol y genera electricidad.
¿Qué beneficios tiene el autoconsumo solar para empresas?
Principalmente está en el ahorro económico que se obtiene. Esta forma de consumo energético es respetuosa con el medioambiente, ya que no emite gases de efecto invernadero, y así se reduce la huella de carbono. Además, estos equipos de autoconsumo son el futuro de la energía en el mundo, por eso muchas viviendas que instalan este tipo de sistemas se revalorizan. También, hay subvenciones que dan las comunidades autónomas para ayudar a sumarse al autoconsumo. Desde Novaluz destacan algunos de los beneficios del autoconsumo solar:
1. Ahorrar en el consumo de energía eléctrica de la red: tener placas solares significa consumir de manera directa la energía que estamos generando. Usar este tipo de sistemas, se puede llegar a aminorar el gasto eléctrico entre un 50% y un 70%.
2. Ayudar e incentivos: en el caso de la energía solar fotovoltaica en España, las ayudas van desde el 15% para una gran empresa hasta el 45% para una pyme, según datos de MITECO. Por lo tanto, los particulares podrán beneficiarse de un 40% que sube al 50% en los sistemas de autoconsumo colectivo y se pueden obtener beneficios fiscales como la reducción del 50% del IBI y hasta en 95% del Impuesto sobre Instalaciones, Construcciones y Obras (ICIO).
3. Excedentes de energía producida: el autoconsumo fotovoltaico compensa en el caso de excedentes. La electricidad que se genera y no se consume se vierte en la red y se contabiliza con un contador y la empresa comercializadora está obligada a descontar la diferencia.
4. Compromiso con el medioambiente: los gobiernos tienen una competencia sobre el mercado de las energías y el cuidado del medioambiente inexorable, pero los esfuerzos individuales de particulares y empresas son imprescindibles para poder ayudar a la reducción de CO2 en la atmósfera.
5. Apuesta de valor: Aunque invertir en placas solares pueda parecer un gran desembolso, lo cierto es que en el largo plazo se convierte en una inversión con una gran rentabilidad. Para las empresas, esto se visibiliza con la confianza del consumidor hacia la marca, según un informe de Capgemini, 8 de cada 10 personas han cambiado sus preferencias de compra basándose en criterios de responsabilidad social, inclusividad o el impacto medioambiental, lo que se traduce en que las empresas verdes mejoran su imagen y posicionamiento.