Corrupto, el disfraz estrella de Halloween
Quienes pensaban que el ébola sería el rey del mambo esta festividad de todos los santos, se equivocaban. Lo que de verdad va a triunfar es el disfraz de corrupto, ya sea a lo Blesa, a lo Pujol o a lo Granados, aunque la lista para elegir es tan larga que uno ya no sabe en quién inspirarse.
Nada provoca más miedo que un político corrupto. Porque con lo que han robado uno tras otro, tú no tendrías que llevar la penosa vida que te han impuesto a base de recortes y reformas laborales.
Quienes pensaban que el ébola sería el rey del mambo esta festividad de todos los santos, se equivocaban. Lo que de verdad va a triunfar es el disfraz de corrupto, ya sea a lo Blesa, a lo Pujol o a lo Granados, aunque la lista para elegir es tan larga que uno ya no sabe en quién inspirarse.
Cuello italiano, nudo windsor y raya diplomática. El estilo perfecto del corrupto medio.
Lo primero que tienes que hacer es buscar un modelo al que parecerte, y luego aplicarte en buscar un atuendo básico del perfecto corrupto. Por lo general, y dado que son de cuello ancho, les encantan las camisas de cuello italiano, más abierto de lo normal. Ya sea por las comilonas, que acaban engordando la papada, o por la flacidez propia de la edad. Aunque en realidad, la mayoría están convencidos de que el cuello italiano es de lo más elegante y les procura un aire distinguido.
El nudo de la corbata les gusta poderoso, tal y como ellos se sienten, así que echan mano del clásico windsor, que para eso va que ni pintado. Los trajes, mejor gris marengo o raya diplomática, que viste mucho en las altas esferas en las que se mueven. Las camisas, blancas o azul oxford, que tampoco es conveniente meter más la pata probando nuevas combinaciones. A ellos les basta con aprenderse la de la caja fuerte en Suiza o las de las cuentas en las islas Caimán.
Los complementos son muy importantes para aderezar el disfraz básico. Tarjetas black, pañuelo asomando por el bolsillo del traje y pelo engominado a lo vampiro, si vas de Blesa. Un reloj enorme en la muñeca y alguna pulserita, espuma efecto mojado, más una corbata en colores agresivos, si te decantas por Granados. En el caso de Pujol, una saca de la que asomen milloncejos y un talonario de un banco andorrano pondrán la guinda. No te olvides de ir echando la bronca a diestro y siniestro. Menudo eres tu, a ver quién es el guapo que duda de tu honrabilidad. Faltaría más.
Este post fue publicado inicialmente en TU2IS