¿Presidenta de la Generalitat?
El efecto Inés Arrimadas se ha hecho evidente esta semana. "Ciudadanos se ha venido arriba. Arrimadas está tirando del voto femenino en un partido de votantes mayoritariamente varones. Ha logrado ser la formación que más crece en este final de campaña", apunta un demoscópico que tiene acceso a los tracking -encuesta pequeña y diaria que sigue la tendencia cada día- de los principales partidos, esos que traen de cabeza estos días a todos los candidatos.
Foto: EFE
El efecto Inés Arrimadas se ha hecho evidente esta semana. "Ciudadanos se ha venido arriba. Arrimadas está tirando del voto femenino en un partido de votantes mayoritariamente varones. Ha logrado ser la formación que más crece en este final de campaña", apunta un demoscópico que tiene acceso a los tracking -encuesta pequeña y diaria que sigue la tendencia cada día- de los principales partidos, esos que traen de cabeza estos días a todos los candidatos.
"Es mejor que yo". Así habla Albert Rivera, tanto en público como en privado, de esta catalana nacida en Jerez de la Frontera y candidata de C´s a la Generalitat. "Va a ser determinante en la política española, puede ser la primera presidenta de Cataluña o la jefa de la oposición". Las palabras del presidente de Ciudadanos no tendrían mayor interés de no ser porque antes de que Rivera nos lo reconociese en el post-desayuno protagonizado por Arrimadas en el Fórum Europa del Ritz, no hubiésemos comprobado que hasta sus rivales hablan bien de ella. "Arrimadas es efectiva, va al grano y tiene respuestas para todo. Impresiona en los debates", confiesa un socialista que ha coincidido varias veces con ella.
El hecho es que ni su juventud, 34 años, ni ser mujer, ha resultado un hándicap para que hoy se metiera en el bolsillo al establishment más conservador de Madrid, feudo habitual del PP. Representantes de empresarios y banqueros han escuchado atentamente, a pesar de que a partir de la media hora su discurso sonaba reiterativo y machacón, contaminado por el tono mitinero, propio de la campaña. "Ha estado soberbia. Ha demostrado su formación a pesar de su edad. Ha estado brillante", afirmaba José Antonio Segurado, histórico fundador de las patronales CEIM y CEOE, resistente dinosaurio que esperaba entusiasmado en el besamanos para felicitar a Arrimadas y Rivera, con otros de sus veteranos colegas. Era otra muestra pública del apoyo que la formación mantiene en los despachos del poder económico y que en las mesas del café entre ejecutivos y empresarios, se plasmaba en alabar la habilidad de Albert Rivera para detectar profesionales competentes. "Es que es una chica muy lista (sobre Arrimadas). Se ve que Albert tiene mano para elegir, porque la de Madrid también es buena" comentaba satisfecho un empresario al que estaba a su lado. La de Madrid es Begoña Villacís, quien atribuye el éxito de Inés y de ella a que "se nos nota que somos profesionales, que estamos acostumbradas a trabajar en el sector privado". "Entre las dos pueden hacer un sándwich con Rivera", remataba con ironía otro de los asistentes.
¿Puede ser Inés Arrimadas la revelación del 27S? ¿Terminará comiéndose a Albert Rivera? "Seguro que sí. Es mejor que yo, ya lo he dicho. Lo está demostrando", insiste Rivera, mientras nos presenta a la "futura presidenta de la Generalitat". Quitándose la palabra el uno al otro, recuerdan como se conocieron: "Una amiga del trabajo me llevó a un acto de las juventudes de Ciudadanos, y desde ese momento, me involucré", explica Arrimadas. "En un taller de oratoria de los muchos que organizábamos, ella debatió conmigo sobre la prohibición del tabaco. Estuvo fantástica y la fiché. Yo ya tengo ojo en cuanto hablan, y ella me impactó" añade Rivera, tan seguro de su liderazgo que no teme reconocer el potencial de la candidata.
Ambos charlan con soltura, rodeados de cada vez más ejecutivos encorbatados que esperan para felicitarles y animarles a "afrontar este domingo crucial para España", declara otro de quienes les rodean. "Que la gente sea mayor no importa. Tenemos datos tracking de estos días que nos dicen que hay gente de setenta años -y de más- que este domingo va a salir de casa a votarnos. Eran los que votaban a Felipe González", revela Rivera, mientras se vuelve a saludar. Inés Arrimadas recupera la hebra de las palabras de su jefe. "Si este domingo, como nos dicen nuestros datos, salen a votar gentes mayores, muchos antiguos votantes de los socialistas, podemos llevarnos una sorpresa. De verdad, os lo digo muy en serio, confío mucho, pero mucho, en ese voto que está silenciado. El día 28 puede ser un gran día".
Puede que el éxito de la candidata de C´s sea que cree en los que dice y el énfasis en sus palabras aún no suena ha desgastado, aunque sea tirando de los mensajes cortos y fáciles, pero efectivos. "Un detalle importante, clave -le dice al auditorio del Hotel Ritz-: si con los datos de encuestas que hay ahora, desglosáramos a la coalición Junts pel Sí, Ciudadanos seríamos la primera fuerza política en Cataluña, por delante de Convergència y de Esquerra". Asentimiento general a sus palabras y nueva oleada de entusiasmo entre los presentes. Otra: "Si gobernamos, voy a preguntar a los ciudadanos 'qué necesitáis', no qué bandera cuelga de su balcón". Poco después recuerda que ellos son el partido del centro, el centro liberal, según las encuestas, insiste Rivera, quien recuerda que los tres o cuatro millones de votos del centro son los que han dado el triunfo al PP o al PSOE. "Inés Arrimadas está mejor que yo en los sondeos porque estamos haciendo la mejor campaña que hemos hecho nunca", Rivera dixit de su candidata.
Solo faltan cuatro días para saber si es cierto y lo del efecto Arrimadas es una realidad o solo un espejismo.