La última "Contradanza" de Francisco Ors
Francisco Ors acaba de morir y este es su obituario. A él va dirigido este pequeño homenaje que quiere ser también una invitación a los vivos a conocer su obra y sobre todo a los directores a que resuciten "Contradanza", el mejor legado a la cultura gay/cultura española que nos pudo dejar.
Año 1998. La acción se sitúa en la redacción de la revista Zero, la que fue primera revista gay española de estilos de vida, desaparecida hace cuatro años, pero que en aquel momento estaba iniciando la que sería una brillante, aunque breve andadura. Entra en escena Francisco Ors (Casinos, Valencia 1930 - Zaragoza 22 de julio de 2013) dramaturgo de éxito en los años ochenta, pero en 1998 ya es un hombre mayor, olvidado y jubilado. Al llegar a la redacción pregunta por el responsable de cultura en la revista, que en esa época era yo. Hablamos y me pide ayuda. Quiere publicar un libro titulado "El encanto masculino". Días después hablé con una editorial gay (Odisea Editorial) y un año después se publicó. También hablé poco después con otra editorial (Egales) para pedirles que reeditasen su texto teatral más conocido "Contradanza" una obra de tema gay que se estrenó en el Teatro Lara de Madrid en 1980 y que no llegué a ver, aunque supe en el momento de su estreno que había sido un gran éxito y también un gran escándalo porque en la obra hacía de supuesta mujer José Luis Pellicena (uno de los actores de teatro más populares del momento) quien interpretaba a la reina de Inglaterra, acompañado por Manuel Gallardo y Gemma Cuervo, dirigidos todos ellos por José Tamayo.
La obra comenzaba con una escena de sexo (penetración anal incluida) entre la reina (Pellicena) y su amante (Gallardo). La reina era Isabel I de Inglaterra, de la que siempre se dudó de su verdadero género (ni se casó ni tuvo hijos) lo que aprovecha el autor para crear una ficción histórica que es todo un alegato en defensa de los derechos de los homosexuales, por mucho que Ors en una entrevista el día antes del estreno en el diario ABC declare que la obra e su opinión "va mucho más allá de la homosexualidad". La obra, su gran obra, ha tenido un largo recorrido que llega en nuestros días hasta el director Juan Carlos Pérez de la Fuente, quien se mostró interesado en montarla hace unos pocos años (según me contó Ors) sin que al parecer el proyecto se llegara a concretar, desconozco porqué motivos. Antes, en junio de 2005, dentro del marco del Festival Visible de cultura LGTB, se llevó a cabo una hermosa lectura dramatizada en el teatro Español de Madrid dirigida por el actor y director valenciano Pau Durá.
Pero si Ors vivió un momento de gloria este fue el año 1993 y se lo debió a Nuria Espert. La Espert, invitada a dirigir un texto de Lorca en Japón, sugirió en cambio montar "Contradanza". Una decisión valiente al tratarse de una obra desconocida fuera de España. La obra se montó en el teatro Ginza Saison, de Tokio, que con este texto abrió la temporada. El montaje contaba con un elevado presupuesto y con actores japoneses. Nuria Espert, hacía tres años había dirigido en el mismo teatro y también con actores japoneses "La casa de Bernarda Alba". En "Contradanza" el papel de la reina lo interpretó Tamasaburo Bando uno de los actores onnagata (actores especializados en desempeñar roles femeninos siguiendo la tradición del teatro Kabuki) más populares de todo Japón. Ors siempre se mostraba orgulloso del lujo del montaje japonés en contraste con la pobreza de medios del estreno madrileño. Siempre se lamentó de la pobreza, la ramplonería y la escasez de medios del teatro español, algo que en parte acabó distanciándolo del mundo de la escena.
Japón fue la punta del iceberg, el momento mágico en la trayectoria de un hombre que comenzó trabajando como guionista en los primeros y duros tiempos de RTVE, en Prado del Rey, en un momento arqueológico de la televisión en España y que más tarde conoció el éxito con "Contradanza" y con "El día de Gloria". Francisco Ors fue un conservador, un burgués que sin embargo escribió una de las primeras obras de teatro que en España se atrevían a tratar el tema de la homosexualidad de forma abierta y además con una actitud abiertamente militante, en la que defendía la libertad de amar por encima de todo, casi a la manera de Shakespeare. No escribió mucho más. Era un dandy fuera de tiempo, un hombre decimonónico que apenas pertenecía a este mundo y su visible y casi completo vitíligo (decoloración de la piel) venía a reforzar esta imagen un tanto distante y ajena a los avatares de la vida cotidiana y sus vaivenes.
Francisco Ors acaba de morir y este es su obituario. A él va dirigido este pequeño homenaje que quiere ser también una invitación a los vivos a conocer su obra y sobre todo a los directores a que resuciten "Contradanza", el mejor legado a la cultura gay/cultura española que nos pudo dejar.