Y fue entonces cuando me lo contó todo. Me lo disparó a bocajarro. Yo no daba crédito, estaba muy confuso y la ginebra no ayudaba precisamente. Le hice mil preguntas. Me las contesto todas.Al principio pensé que iba de farol. La profusión de detalles me confirmo que no. Me quedé completamente helado. En puro y duro estado de shock.