Aunque hayas sido una marca legendaria, si tu negocio tradicional ya no da beneficios, o te hundes mientras la orquesta sigue tocando o cambias de rumbo para sobrevivir. Renovarse o morir. Parece sensato. De cajón. La aplastante lógica empresarial no parece que sea la lógica política en España. Cuando una y otra vez los informes PISA nos sacan los colores, una piensa que algo debería empezar a cambiar.