Tanto por su fondo mítico -magnífico y letal, tal y como lo concibió Tolkien- como por su forma digital -avatar deslumbrante de las realidades virtuale-, el Smaug que ha llegado a las pantallas está llamado a convertirse en el mejor símbolo posible de la nueva mirada que construye el cine digital.
Los herederos de los derechos de Tolkien amenazan con demandar a Warner por lo que consideran un exceso de los términos del contrato para la adaptación cinematográfica de 'El Hobbit'. Y el exceso no es otro que el lanzamiento online de una máquina tragaperras virtual que les ha molestado especialmente.