Hasta siempre, señor Cohen
Leonard Cohen, en aquellas noches (creativas) y en tantas otras (destructivas). Leonard Cohen, siempre ahí, al alcance de la mano, en un viejo disco, cuando la tristeza o la melancolía se apoderaban de nosotros, cuando el frío de la habitación era más intenso que el del otro lado pero era el único refugio posible.