¿Sabías que las estaciones modifican la expresión de nuestros genes (ADN)? Yo tampoco lo sabía, y es un nuevo ejemplo de epigenética, en donde los factores ambientales influyen en la actividad de nuestros genes. Parece una película de ciencia ficción, pero es así.
Si somos capaces de detectar riesgos en la salud de los pacientes, no solo de forma individualizada sino del conjunto de la población, podremos utilizar los recursos sanitarios de la manera más inteligente y a un menor coste, algo crucial en el momento que atravesamos.
No es el sitio del pediatra ir de la mano de la familia, ni siquiera ser amigo de ellos. Debe ser un profesional cercano, amable, que escuche y empatice con la familia. Deber estar disponible, sí, pero no es un primo ni un segundo padre. Ni un cuñado, que los cuñados en este país tienen un tinte siempre peyorativo.
De acuerdo a los resultados, el nuevo test genético detectó el 92% de los casos de cáncer de colon y el 42% de los pólipos avanzados, mientras que el test de sangre oculta en materia fecal (FIT: prueba fecal de inmunohistoquímica) detectó 74% de los casos de cáncer de colon y 24% de los pólipos avanzados.
Actualmente las personas quieren tener información propia y saber lo que les está pasando. Y, no solamente eso, las personas quieren tomar decisiones de acuerdo a esos datos que obtienen a través de la comunicación con el médico, un test genético o de una herramienta que tienen en su celular.
Por mucho tiempo se creyó que sólo una pequeña parte de nuestro ADN desempeñaba un papel esencial en los procesos de la vida y al resto se le despreciaba y llamaba ADN basura. Sin embargo, ahora sabemos que ese ADN basura no es quizás sino la clave verdadera de la vida.